Estos fenómenos amenazan la salud pública más allá de la destrucción visible. Un análisis de los devastadores fuegos de agosto de 2023 en Lāhainā (Maui, Hawái) revela que la mortalidad fue dos tercios más alta de lo esperado ese mes.
Un grupo de científicos logra que la ‘Escherichia coli’ degrade nanoplásticos sin introducir genes externos. La técnica GenRewire reprograma las propias proteínas bacterianas gracias a la combinación de IA y supercomputación.
Una mutación en las células beta pancreáticas genera una cadena de fallos en la producción de insulina, lo que favorece la hiperglucemia crónica. Los hallazgos proponen nuevas vías terapéuticas para esta condición metabólica.
Un estudio revela que, tras una compresión física, estas células responden con un pico energético que les permite reparar daños en el ADN y garantizar su supervivencia en espacios densos o estrechos del cuerpo humano. La investigación ofrece una vía para inmovilizarlas antes de que se expandan.
Un estudio en Nature Neuroscience muestra que señales visuales de enfermedad, presentadas en un entorno de realidad virtual, activan zonas cerebrales de alerta y desencadenan una respuesta inmunitaria similar a la provocada por patógenos reales.
Una nueva investigación ha identificado las regiones del ADN relacionadas con este trastorno del habla. El trabajo también apunta a similitudes genéticas con otras condiciones neuropsicológicas y desafía creencias arraigadas que alimentan su estigmatización.
Tecnologías como la desarrollada en el CRG de Barcelona y nuevas secuencias de ADN completas permiten construir el mapa genético más preciso hasta ahora, con aplicaciones clave en medicina personalizada y enfermedades raras. Dos nuevos estudios en Nature lo detallan.
Las células reproductoras femeninas disminuyen de forma deliberada la actividad de sus mecanismos internos de mantenimiento a medida que maduran. Esta estrategia metabólica minimalista podría preservarlas durante décadas y mejorar las tasas de éxito en los tratamientos de fertilidad, según un estudio.
Un estudio revela que mirar actuaciones de danza en directo y junto a otras personas sincroniza las ondas cerebrales de baja frecuencia de los asistentes, a diferencia de verlos a solas en casa. La sincronía es mayor cuando los artistas interactúan con la audiencia.
La genómica avanzada y la medicina de precisión se han convertido en dos aliados clave para transformar la identificación de estas patologías en Europa. Esta tecnología acorta los tiempos de los pacientes y familias que esperan un diagnóstico. De media, en España se tardan 6 años y en el 20 % de los casos transcurren 10 o más.