La revista Nature Communications publica el desarrollo de un test sanguíneo no invasivo que podría utilizarse para la detección en fase inicial de cinco tipos comunes de cáncer –estómago, esófago, colorrectal, pulmón o hígado– y hasta cuatro años antes del diagnóstico convencional.
La supervivencia de los pacientes de cáncer aumenta significativamente cuando la enfermedad se identifica en las etapas iniciales, ya que el tumor puede ser extirpado quirúrgicamente o tratado con los medicamentos adecuados. Sin embargo, esto no siempre es posible al apenas haber un número limitado de pruebas de detección y solo para unos pocos tipos de tumor.
Un nuevo estudio, liderado por expertos de la Universidad de California en San Diego (EE UU), describe una prueba de detección del cáncer en la sangre –PanSeer– que examina las firmas de metilación específicas del tumor. Los resultados han sido publicados en la revista Nature Communications.
Los autores, con Kun Zhang a la cabeza, realizaron un análisis de muestras de plasma obtenidas de 605 individuos asintomáticos, 191 de los cuales fueron diagnosticados posteriormente con cáncer. Además, hicieron un perfil de las muestras de otros 223 pacientes de cáncer diagnosticados, así como de 200 muestras de tumores primarios y de tejidos normales.
Según la investigación, la prueba puede detectar con alta especificidad cinco tipos comunes de cáncer (estómago, esófago, colorrectal, pulmón o hígado) en pacientes que ya habían sido diagnosticados, así como en individuos asintomáticos hasta cuatro años antes del diagnóstico convencional.
“La principal novedad de este trabajo reside en la demostración de cómo las señales del cáncer en la sangre pueden ser detectadas de 1 a 4 años antes de que esos pacientes sean diagnosticados por primera vez en los hospitales”, explica a SiINC Zhang.
Los autores han querido dejar claro las limitaciones de este estudio: “Es poco probable que el ensayo PanSeer pronostique a los pacientes que desarrollarán cáncer en el futuro. En cambio, lo más probable es que identifique a aquellos que ya tienen crecimiento tumoral pero que continúan asintomáticos por los métodos de detección actuales”.
Por ello, insisten en la necesidad de más estudios longitudinales a gran escala para confirmar el potencial de la prueba en la detección precoz del cáncer en personas que aún no hayan sido diagnosticadas.
“Pruebas de detección temprana como esta aumentarían enormemente la tasa de éxito en la curación del cáncer en las primeras etapas a través de la extirpación quirúrgica de los tumores”, concluye Zhang.
Referencia:
Kun Zhang et al.: "Non-invasive early detection of cancer four years before conventional diagnosis using a blood test" Nature Communications. DOI 10.1038/s41467-020-17316-z https://www.nature.com/articles/s41467-020-17316-z