Investigadores de la Universidad de Málaga, en colaboración con Albentia Systems, han desarrollado un robot preparado para trabajar en catástrofes nucleares. El sistema, llamado Alacrane, cuenta con dispositivos autónomos capaces de monitorizar niveles de radiación, gases y temperatura, y analizar la situación en tiempo real. Además, supera obstáculos y retira escombros de 400 kilos. Alacrane dispone de una cámara térmica y otras dos que funcionan como ojos y así poder localizar víctimas entre los restos.
El departamento de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad de Málaga y la empresa española Albentia Systems han desarrollado un robot llamado Alacrane, capaz de operar en múltiples situaciones de catástrofe, entre ellas un desastre nuclear.
Según explican los responsables del proyecto, Alacrane cuenta con dispositivos autónomos para monitorizar parámetros como niveles de radiación, gases, temperatura y análisis de la situación en tiempo real. El sistema es capaz de superar obstáculos y retirar escombros de hasta 400 kilos de peso. Y dispone de una cámara térmica y otras dos cámaras que funcionan como ojos para, así, poder localizar víctimas entre los restos.
Toda la información obtenida por Alacrane es transmitida a los gabinetes de crisis de alertas nucleares donde se procesan los datos y se difunden después a los servicios de emergencias implicados en la operación de salvaguarda, señalan.
Para poder realizar el proceso el sistema utiliza la tecnología inalámbrica WiMAX de Albentia Systems, que permite que el robot disponga de una red multipropósito. De este modo, indica la empresa, podrá diferenciar con total garantía los diferentes flujos de datos, voz y vídeo, garantizando el uso simultáneo de dichos servicios de forma que se dé prioridad a unos frente a otros, según se requiera.
Margen de movimiento con conexión de hasta 20 km
En el robot hay instalado un terminal de usuario que, mediante una antena omnidireccional, permite la comunicación con el centro de supervisión sin necesidad de apuntamiento manual. Este equipo recibe la información de cada uno de los dispositivos embarcados y los retransmite por vía inalámbrica. Además hace posible añadir tantos servicios como sean necesarios.
Por otro lado, la estación base ARBA 500, que opera en la banda libre de 5,8 GHz, proporciona al robot un margen de movimiento con conexión de hasta 20 km. Este equipo se encuentra instalado en el punto de control desde donde, mediante un conmutador, se conecta al punto de conexión a Internet para el envío de los datos, explican.