Las parras para las uvas de mesa y el vino se domesticaron simultáneamente, hace 11.000 años, con la llegada de la agricultura. Así lo determina una investigación con la mayor muestra genética de plantas de vid recolectadas hasta la fecha en distintas ubicaciones geográficas.
Algunos agricultores introducen en sus invernaderos a estos pequeños animales invertebrados que devoran las plagas, porque son la única alternativa para acabar con ellas. Para que sea eficaz, es importante que permanezcan en el cultivo incluso cuando no haya plagas dañinas. Esto requiere una monitorización constante.
Esta fruta es una de las más consumidas y exportadas en México, pero está amenazada por la denominada enfermedad de Panamá que ataca a sus raíces. El género de hongo Trichoderma, presente en todo el mundo, ha demostrado ser muy beneficioso para los campos donde se plantan este y otros alimentos.
Investigadores del CSIC han identificado una proteína clave para el desarrollo vegetal en respuesta a temperaturas elevadas. El modelo, basado en la regulación de dicha proteína, permite predecir cómo el calentamiento global afecta al crecimiento de las plantas según diferentes parámetros ambientales.
Un nuevo modelo que combina aspectos económicos y meteorológicos, junto al rendimiento de este cereal, permite estimar en detalle las consecuencias de las condiciones climáticas medias y los eventos extremos en el precio y la cadena global de oferta y demanda de dicho cereal.
Científicos del CSIC han viajado a la remota isla de Svalbard donde han entregado una selección de mil variedades vegetales que serán depositadas en el Banco Mundial de Semillas noruego, la avanzada infraestructura científica que atesora la mayor colección de seguridad de la biodiversidad agrícola global, y que salvaguarda la base de la alimentación mundial.
La larga historia humana está marcada irremediablemente por el momento en el que comenzamos a cultivar productos agrícolas y su difusión se generalizó. Conocer cómo lo logramos a través de los siglos y qué comíamos y cultivábamos nos acerca a los antepasados y sus vidas. Leonor P. Chocarro, científica del CSIC, cuenta a SINC parte de sus hallazgos a través de la arqueobotánica.
Un equipo del Centro Nacional de Biotecnología ha hallado que el gen BRANCHED1b, encargado de regular varios procesos moleculares relacionados con periodos de inactividad vegetal, es también responsable de que los tubérculos se formen bajo tierra.
Este suplemento ayudará a disminuir en un 20 % o 35 % las emisiones de este gas de efecto invernadero que emiten los rumiantes al eructar. Además, es seguro tanto para los animales como para los consumidores y no afecta a la calidad de los productos lácteos.
Uno de los principales problemas de la industria agrícola y ganadera es que genera desechos, como los purines, que crean malos olores, contaminación y un impacto ecológico evidente. Los científicos plantean soluciones que equilibren sus aspectos ambientales, económicos y sociales.