España recupera cada año más de 170.000 hectáreas de superficie de bosque, lo que lo convierte en el país europeo que mejor afronta la deforestación. Estos datos, que coinciden con la celebración del Año Internacional de los Bosques, se recogen en el informe Situación de los bosques en España que ha presentado hoy la Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés).
Un equipo internacional, con participación española, ha hallado una nueva especie de molusco, Polyconites hadriani, en varias zonas de la Península Ibérica. Según los investigadores, este ejemplar, que es el más antiguo de su género, se adaptó a la acidificación de los océanos durante su existencia. Este proceso podría predecir ahora la evolución de los sistemas marinos modernos.
Dos ejemplares de Polyconites hadriani con las dos valvas articuladas: la inferior cónica y la superior opercular (plana).
La Unión Internacional de Ciencias Geológicas (IUGS) celebra en la sede de la UNESCO en París, el 50 Aniversario de su fundación con varias presentaciones temáticas y siete conferencias invitadas. Una de ellas será impartida por Jesús Martínez Frías, geólogo planetario del Centro de Astrobiología CSIC-INTA y presidente de la Comisión de Educación, Formación y Transferencia de Tecnología en Geociencias de la Unión Internacional de Ciencias Geológicas.
Dos personas buscan supervivientes del terremoto de Haití.
El aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero causó un incremento de las precipitaciones y del riesgo de inundaciones durante la segunda mitad del siglo XX
Investigadores europeos han creado un primer modelo de detección de actividad sísmica. El estudio, que se publica hoy en la revista Science, demuestra que el inicio de un terremoto está precedido por un desplazamiento de la falla. Los resultados se obtienen del análisis de uno de los seísmos mejor registrados: el terremoto que sacudió Turquía en 1999 con una magnitud de 7,6.
Los resultados del proyecto GeoViQua, financiado por la Unión Europea (UE) y coordinado desde el Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales (CREAF), permitirán evaluar y mitigar los efectos de catástrofes ambientales o evitar interpretaciones dudosas sobre temas tan polémicos como el cambio climático