El científico Robert May demostró matemáticamente en 1972 que un aumento en la biodiversidad conduce a una mayor inestabilidad ecológica, sin embargo, observamos que redes complejas como los ecosistemas o internet son bastante estables frente a las perturbaciones. Ahora un estudio internacional ofrece una solución para esta paradoja.
Investigadores del CSIC muestran cómo el deshielo causado por el aumento de temperatura deriva en mayores emisiones oceánicas de mercurio a la atmósfera en la región. El trabajo revela que la deposición de mercurio sobre la superficie del hielo ártico se triplicó al comienzo del Holoceno comparado con el último ciclo glacial.