Pesticidas, sustancias químicas industriales, aditivos alimentarios y fármacos contienen algunos compuestos químicos tóxicos a los que nos exponemos diariamente. Para valorar los efectos de estos contaminantes en humanos y animales, los científicos han experimentado con seres vivos, pero científicos estadounidenses proponen, mediante el proyecto Tox21, una alternativa sin necesidad de realizar pruebas a animales.
El jurado del II Premio de Periodismo Instituto Roche en Medicina Personalizada ha otorgado a Marta Palomo un accésit por el reportaje Excrementos que salvan vidas, publicado en Sinc. El galardón reconoce la importancia científica y biomédica del trasplante fecal para mejorar la microbiota intestinal “que la autora ha relatado magníficamente, de forma amena e interesante a pesar de ser un tema tan complejo”.
Este año la Fundación BBVA ha otorgado su premio a Edward Boyden, Karl Deisseroth y Gero Miesenböck por desarrollar la optogenética. Para los miembros del jurado, esta práctica “ha revolucionado el estudio de la función cerebral y actualmente es empleada por neurocientíficos de todo el mundo”.
Científicos de IBM Research en Zúrich y de la Universidad de Santiago de Compostela han observado por primera vez a escala atómica un reagrupamiento molecular conocido como la ciclación de Bergman, descrito en 1972. Para visualizarlo han empleado una punta extremadamente fina capaz de medir pequeñas fuerzas entre su extremo y la muestra.
Científicos europeos han recogido los diminutos hongos que se cobijan en las rocas de la Antártida y los han enviado a la Estación Espacial Internacional. Tras permanecer allí durante año y medio en condiciones parecidas a las de Marte, más de un 60% de sus células permanecían intactas, con el ADN estable. Los resultados aportan nueva información en la búsqueda de vida en el planeta rojo. En el mismo experimento también viajaron al espacio líquenes españoles de la Sierra de Gredos.
La misión espacial RadioAstron de la Agencia Espacial Rusa, junto con otros quince radiotelescopios distribuidos por toda la Tierra, ha observado el entorno del agujero negro en el núcleo de la galaxia activa BL Lacertae. Al operar conjuntamente, las antenas funcionan como un radiotelescopio con un diámetro equivalente a ocho veces el diámetro de nuestro planeta, y han obtenido la imagen con mejor resolución jamás obtenida en astronomía. El Instituto de Astrofísica de Andalucía ha liderado el estudio.