Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han utilizado la realidad aumentada y la visión por ordenador para recrear en móviles y tabletas los restos arqueológicos del yacimiento de Complutum, la antigua ciudad romana sobre la que se asienta Alcalá de Henares. La aplicación se puede descargar desde Google Play.
Científicos españoles han descubierto en el yacimiento de Barranc de la Boella (Tarragona) una letrina con excrementos fosilizados de hienas del Pleistoceno. El análisis de estos restos permitirá conocer la alimentación de estos animales y cómo era el entorno en el que vivieron hace cerca de un millón de años. Además, los investigadores han encontrado otros restos de las primeras poblaciones humanas en Cataluña.
Un estudio del Max Planck Institute y la Universidad de Valencia ha detectado la primera evidencia del consumo humano de setas. Los autores han explorado la dieta mediante el análisis de cálculos dentales de individuos del Paleolítico superior europeo en el yacimiento cántabro de El Mirón. Los análisis han detectado un gran abanico de microrrestos de origen vegetal, fúngico, animal y mineral atrapados en los cálculos dentales en vida, que aportan información muy valiosa sobre la alimentación en aquella época.
Cien fotos en una retratan el pecio Bou-Ferrer. / Taller de Imagen-UA
La cueva cántabra de La Garma sigue aportando valiosa información sobre el pasado prehistórico de la región y sobre el cambio climático. El estudio más reciente, en el que han participado investigadores de la Universidad de Cantabria, ha permitido reconstruir cómo se desplazaban los vientos y qué presiones predominaban en el sur de Europa, gracias a los datos obtenidos de una de las estalagmitas de la galería inferior de la cavidad.
Un equipo internacional de científicos ha analizado el pelo de las momias halladas hace 90 años en la necrópolis de Wari Kayan (Perú) de 2.000 años de antigüedad. Los resultados revelan que los miembros de la cultura paracas, la civilización anterior a los incas, consumieron productos marinos y plantas como el maíz y los frijoles los meses anteriores a su muerte. Según los investigadores, los restos arqueológicos del yacimiento pueden seguir ofreciendo información sobre esta cultura preincaica.
Un equipo de la Universidad de Barcelona (UB), en colaboración con la empresa Digit, ha creado una aplicación móvil que recrea en 3D la ciudadela ibérica de Calafell (Tarragona), que tiene 2.500 años de antigüedad. La aplicación gratuita, llamada Calafell Open Air Museum, utiliza la tecnología de la realidad aumentada y las posibilidades de la realidad virtual para mostrar cómo era esta población en diferentes épocas de su historia (siglos VI-III aC).
El hallazgo de tres arcos de madera de hace más de 7.000 años proporciona nuevos datos sobre el rol social de la caza, la especialización y el acceso a los recursos en las primeras sociedades campesinas. Los arcos, recuperados en el yacimiento de La Draga (Banyoles, Girona), son la evidencia más antigua de arquería neolítica en Europa.
Estudiantes del grado de Arqueología de la Universidad de Barcelona han hallado los restos de una construcción ibérica que podría haber sido destruida por los romanos durante la Segunda Guerra Púnica que enfrentó a Roma y Cartago por la hegemonía del Mediterráneo.