Investigadores de la Universidad de Málaga, junto a colegas brasileños, han aplicado nanoesferas de calcio procedentes de corazas de crustáceos para propiciar la reacción química necesaria para obtener biodiésel. Se trata del primer estudio que utiliza este material barato y abundante en la naturaleza para fabricar el biocombustible.
Científicos de la Universidad de Córdoba han logrado acelerar el proceso de obtención de gasolina y diésel añadiendo platino a los catalizadores tradicionales, elementos sólidos que se requieren para que se desarrolle la reacción química en la biomasa de origen
Un equipo internacional de científicos ha logrado crear un cromosoma eucariota en el laboratorio. En concreto, han sintetizado el de la levadura Saccharomyces cerevisiae, con el que sefabrica el pan, la cerveza y el vino. Este logro supone un gran paso en el campo de la biología sintética que permitirá el diseño de microorganismos para producir nuevos medicamentos, materias primas para la alimentación y biocombustibles.
Investigadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria de Argentina han logrado recolectar, purificar y comprimir los gases que emiten los bovinos para utilizarlos como fuente energética. Luz, calor, neveras y hasta un coche pueden funcionar con este biocombustible.
Una investigadora de la Universidad de Salamanca han llevado a cabo un estudio que analiza los impactos que la producción de bioetanol. La autora señala que en algunas comunidades indígenas de Brasil, una planta de bioetanol puede suponer un desplazamiento y la destrucción de su modo de vida. En cambio, en otros lugares este tipo de producción puede significar un empujón al desarrollo de la comunidad.
Un grupo de investigación de la Universidad de Cádiz trabaja en la búsqueda de las condiciones óptimas para llevar a cabo la biotransformación de glicerina en etanol, lo que consideran una alternativa viable al biodiesel. También quieren obtener una cepa super-productora de etanol e hidrógeno.
Un equipo de investigadores de la Universidad de Cádiz ha desarrollado un proceso para aprovechar los residuos de la cerveza para la producción de biocombustibles, alimentos funcionales y cosméticos. El proceso será desarrollado próximamente en una planta piloto.
Una investigación pretende producir enzimas a bajo coste a través de una fermentación de residuos agrarios en estado sólido para facilitar la obtención del biocombustible.
Dentro de la industria cárnica, los residuos originados en los mataderos son los que poseen un mayor poder contaminante, fundamentalmente por la presencia en ellos de sangre. Una tesis doctoral, obra de Juan José Espinosa, de la Universidad de Burgos (UBU), ha demostrado que a través de una serie de técnicas es posible convertir todos estos residuos en biogás que, si bien no va a generar la energía suficiente como para mantener una planta entera, sí puede servir de combustible para este proceso de depuración.
Un grupo de investigación de la Universidad de Alcalá coordina un proyecto pionero de depuración de agua residual para el riego de especies que pueden producir biodiésel, así como para la recarga de acuíferos mediante barreras reactivas.