Operación para extirpar un cáncer de colon.
Un total de 19 hospitales españoles participarán en un ensayo clínico multinacional que pretende acortar en un 50% las sesiones de quimioterapia en pacientes con cáncer colorrectal. El estudio será liderado desde España por el Centro Integral Oncológico Clara Campal (CIOCC).
Estructura de la proteína CCL2.
Cuando una persona tiene antecedentes familiares de cáncer, la preocupación por desarrollar la enfermedad puede hacer que se niegue a someterse a pruebas preventivas. El asesoramiento de las unidades de consejo genético disminuye su inquietud pero, hasta ahora, no se sabía cuánto. Un equipo científico ha validado la ‘Escala de Preocupación por el Cáncer’ (EPC), la primera en castellano, para evaluarlo.
Gabriela Llosá (Madrid, 1975), investigadora del Instituto de Física Corpuscular (IFIC), ha sido galardonada en la séptima edición de los Premios Idea de la Fundación Ciudad de las Artes y las Ciencias Comunitat Valenciana en la categoría de Tecnologías. La científica madrileña trabaja en la creación de un telescopio de reconstrucción de imágenes para la terapia hadrónica, una técnica de radioterapia que se aplica a algunos tipos de cáncer.
Desde que el martes la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirmara que las radiaciones asociadas al uso del móvil podrían aumentar el riesgo de sufrir glioma –un tipo de cáncer cerebral–, las opiniones de los expertos fluyen entre la prudencia y la demanda de medidas de protección. Alarma social, torpeza de la OMS o toque de atención. La investigación sobre la amenaza real de estos teléfonos continúa.
La Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC) afirmaba ayer que la radiación de los teléfonos móviles podría ser cancerígena. Uno de sus investigadores, Robert Baan, explica a SINC que, en su opinión, se deberían adoptar medidas para reducir la exposición en niños. Aun así, Baan recalca que la tecnología ha mejorado mucho desde que se realizaron estos estudios.
La Agencia Internacional de Investigación sobre el Cáncer (IARC), dependiente de la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha clasificado los campos de radiofrecuencia emitidos por los teléfonos móviles como “posiblemente cancerígenos”. Desde el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad solicitan “precaución” con esta información.