El péptido iRGD inyectado por vía intravenosa en un vaso sanguíneo del tumor.
La ministra de Ciencia e Innovación, Cristina Garmendia, ha inaugurado hoy en Barcelona el VII Congreso Europeo de Cáncer de Mama, el mayor encuentro internacional sobre este tipo de cáncer en Europa. Durante su intervención, la ministra se ha mostrado optimista y ha revelado que España es uno de los países europeos con menor tasa de mortalidad en cáncer de mama dentro de la Unión Europea.
Científicos del Instituto de Investigación Biomédica (IRB Barcelona) revelan una sorprendente nueva función de la proteína Notch, opuesta a la conocida hasta hoy. La proteína Notch está ubicada en las membranas de las células y activa una cascada de señales que regula la expresión de genes que harán que la célula se divida, crezca, migre, se especialice o muera. El nuevo hallazgo muestra que la presencia de la proteína Notch en la membrana de las células también es necesaria para inactivar la vía, además de para activarla.
Un gen suicida, denominado 'gen E', procedente de colífagos, es capaz de inducir muerte en las células en las que se expresa. Científicos de la Universidad de Granada (UGR) han demostrado la eficacia de este sistema no sólo in vitro (utilizando cultivos de células tumorales), sino también in vivo, mediante el uso de animales de experimentación en los que fueron inducidos este tipo de tumores.
Células de cáncer de mama.
Combinar la quimioterapia (con gemcitabina) en la dosis máxima tolerada con una quimioterapia metronómica (quimioterapia en bajas dosis de aplicación frecuente con capecitabina) además de sorafenib (un medicamento dirigido) da como resultado una mejor supervivencia libre de progresión de la enfermedad (PFS) y una mejor respuesta ante los tumores que la registrada anteriormente.
Micrografía del carcinoma renal más frecuente.
La búsqueda de nuevos compuestos antitumorales es fundamental en la lucha contra el cáncer. La vitamina D posee acciones protectoras frente a diversas neoplasias, entre ellas el cáncer de colon. Su mecanismo de acción parece deberse, al menos en parte, tal y como han observado investigadores del Instituto de Investigaciones Biomédicas “Alberto Sols” (CSIC-(AM), a la regulación de genes relacionados con la degradación de proteínas.