En 2003, un brote de síndrome respiratorio agudo severo obligó a la OMS a mejorar la respuesta global para el tratamiento de crisis sanitarias. Pasado un decenio, la amenaza de un nuevo coronavirus que ha dejado nueve muertos en Oriente Medio y Reino Unido recuerda la necesidad de colaboración. Esta semana un equipo internacional publica en Nature cómo entra este virus en las células humanas.
Investigadores del Centro Nacional de Biotecnología han descifrado cómo el sistema inmune puede evitar las infecciones de coronavirus, que provocan importantes enfermedades respiratorias e intestinales. El nuevo hallazgo indica el camino a seguir para el desarrollo de vacunas que prevengan dichas infecciones.