Ejemplar de sabina de Soria.
Los gobiernos de más de 130 países se han comprometido a intensificar y mejorar la cooperación en temas de cambio climático y protección del medio ambiente. Para ello han firmado hoy la Declaración de Nusa Dua durante la celebración del Foro Ministerial Global sobre Medio Ambiente en Bali (Indonesia) para promover, entro otros, un plan de acción para el desarrollo sostenible.
Una vez agotados los recursos mineros en la superficie terrestre, el ser humano se lanzará a una nueva “aventura”: la explotación de los fondos marinos, una atractiva fuente económica de recursos minerales que ahora parece inagotable por la extensión de los océanos. Pero los mares recogen más del 97% de los seres vivos del Planeta, la gran mayoría desconocidos para la ciencia. Su exploración, ante todo sostenible, arrojará luz allí donde reina la oscuridad.
En la imagen, la ciudad de Banda Aceh, en la isla de Sumatra, antes (arriba) y después (abajo) del tsunami de diciembre de 2004.
Ante las inclemencias de un clima cambiante que afecta a la sociedad en todos los aspectos, más de 150 expertos de 84 países han participado en la XV sesión de la Comisión de Climatología de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para debatir un plan de acción que mejore los servicios climáticos. El plan de acción incluirá también un panel abierto de expertos que se centrará, entre otros, en el tratamiento de la información climática, y la supervisión y evaluación del clima mundial para la gestión de riesgos.
El proyecto europeo de investigación CLICO (Cambio Climático, Conflictos Hídricos y Seguridad Humana) se pone en marcha con unas jornadas que tendrán lugar del 25 al 27 de febrero en Bellaterra. En el proyecto, que lidera el Instituto de Ciencia y Tecnología Ambientales (ICTA) de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) participan investigadores de 14 universidades y centros que estudiarán los conflictos políticos y sociales causados por el cambio climático y las luchas del agua en 11 regiones de Europa y África.
A pesar de las lluvias de esta semana en toda la Península Ibérica y del consecuente rebosamiento de los embalses, el problema de la sequía en España sigue latente. Durante la Conferencia Internacional sobre Escasez de agua y Sequía inaugurada hoy en Madrid, la ministra de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM) Elena Espinosa ha resaltado los esfuerzos institucionales para gestionar “este recurso finito”. En un acto paralelo, las organizaciones ecológicas y sociales manifiestan, botijo en mano, su desacuerdo con las políticas hidrológicas del gobierno.
En noviembre de 2009 salieron a la luz algunos correos electrónicos de científicos británicos cuyo contenido revelaba imprecisiones y, según los escépticos, maximizaba los efectos del cambio climático. Desde entonces se han puesto en duda la fecha del deshielo de los glaciares del Himalaya y las temperaturas ascendentes de China, entre otras cosas. Este hervidero de descrédito que está perturbando a la comunidad científica se llama Climategate. ¿Lograrán las críticas y el desprestigio afectar a la credibilidad de la ciencia climática?
Parque Nacional del Gran Cañón en Arizona (EE UU).