La sonda Stardust de la NASA recolectó hace una década muestras de polvo en el espacio. Desde entonces se analiza con la ayuda de los 700 voluntarios del proyecto Stardust@home, que desde su casa han colaborado con los científicos para examinar el material. Ahora publican juntos en Science los primeros resultados, donde aparecen evidencias de siete partículas que seguramente vengan de más allá del sistema solar.