Científicos del Instituto de Neurociencias de Castilla y León (Incyl) de la Universidad de Salamanca trabajan con ratones modificados genéticamente que sufren ataxia cerebelosa, una enfermedad que tanto en animales como en seres humanos impide controlar adecuadamente los movimientos. Su línea de investigación se centra en probar los efectos de trasplantar médula ósea de roedores sanos a enfermos y los resultados indican que existe una recuperación de algunas funciones, aunque es necesario seguir investigando porque los científicos aún desconocen los mecanismos por los que esto sucede.