El Grupo de Ingeniería Ambiental y Bioprocesos de la Universidad de Santiago (USC), dirigido por Juan Lema, estudia desde hace años los microcontaminantes existentes en las aguas residuales urbanas y trabaja en su eliminación. Se trata de sustancias que están presentes en concentraciones muy bajas, por lo que resultan difíciles de tratar. Los más representativos son los productos farmacéuticos y cosméticos, entre los que se incluyen los productos de higiene y los detergentes.
La utilización de aguas residuales depuradas para regar suelos agrícolas no supone "perturbaciones considerables" frente al uso de aguas blancas procedentes de acuíferos. Ésta es la conclusión a la que han llegado los investigadores de Grupo de Edafología Ambiental del departamento de Agroquímica y Medio Ambiente de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche tras dos años de experimentación en una población alicantina.El objetivo, hallar una alternativa para el ahorro de agua.
Dentro del del programa Consolíder que promueve el MEC, uno de los macroproyectos más novedosos es el NOVEDAR (Nuevas Estaciones Depuradoras de Aguas Residuales), destinado a desarrollar e implementar sistemas de tratamiento de aguas residuales novedosos, además de evaluar y optimizar las estrategias operacionales de las plantas. La iniciativa, en la que participan ocho grupos de investigación españoles y dos holandeses, está liderada por la Universidad de Santiago de Compostela.