El aumento de temperaturas modificará drásticamente el ambiente y la biodiversidad del continente antártico. Según un nuevo estudio, el deshielo expandirá para finales de siglo hasta un 25% el territorio habitable de la flora y fauna autóctonas, al mismo tiempo que permitirá la entrada de especies invasoras. Pero los científicos desconocen aún si los efectos del cambio climático beneficiarán o amenazarán a los seres vivos de la Antártida.
Sustancias de origen humano y otros componentes químicos como retardantes de llama están cada vez más presentes en la Antártida al llegar a través del vertido de aguas residuales, la incineración de residuos y la generación dispersa de estos restos. Dos estudios analizan la presencia de estos contaminantes en aguas antárticas y advierten de las posibles consecuencias medioambientales.
La barrera oceanográfica del frente polar no es tan impenetrable para los briozoos del océano Austral como se pensaba hasta ahora, según un estudio que lidera la Universidad de Barcelona. El nuevo trabajo presenta el inventario más completo realizado hasta la fecha sobre la distribución espacial de los briozoos de aguas poco profundas en las islas Malvinas y las Georgias del Sur.
El equipo de científicos y militares españoles desplegados en la XXX Campaña Antártica en la base Gabriel de Castilla pondrá este jueves rumbo a casa a bordo del buque Hespérides. Junto a ellos, esta temporada se estima que más de 43.000 turistas también viajen al continente helado. Estos lugares inhóspitos y protegidos, como la Antártida, el desierto del Sáhara, la selva de Laos o la sabana africana, cada vez atraen más a un público cuya presencia debe pasar ahora lo más desapercibida posible.
Hace 116 años, el explorador noruego Roald Amundsen fue la primera persona en llegar al Polo Sur convirtiendo a la Antártida en uno de los últimos espacios colonizados por el ser humano. Desde entonces, la presencia humana ha ido aumentando en el continente helado, por lo que ha crecido el impacto ambiental. Un equipo de científicos ha trazado por primera vez el plano completo del paso del hombre por toda la extensión de la Antártida para estudiar las consecuencias medioambientales.
Mientras sus colegas celebran las fiestas navideñas con la familia y los amigos, un puñado de investigadores pasa estos días en los confines del mundo estudiando los efectos del cambio climático, la vida de los pingüinos o la llegada de neutrinos cósmicos a la Tierra. Hablamos con seis de ellos en la Antártida y Cerro Paranal que trabajarán en Navidad, Nochebuena y Año Nuevo.