Un fío-fío silbón en la región de Los Lagos, Argentina. Foto: Mariano Rodríguez.
Científicos de la Universidad Politécnica de Cataluña y del Grupo de Genética Vegetal del SERIDA, en Asturias, han analizado los cambios sensoriales que se producen al variar el momento de la recogida de fabas. Entre sus conclusiones, destacan la posibilidad de adelantar la recogida de la faba asturiana para obtener nuevos usos culinarios que pueden aumentar sus rendimientos.
La forma en que vivimos se apoya sobre una robusta, pero no infalible, malla eléctrica, que desde la Revolución Industrial se ha fijado en el paisaje. Pero el entretejido que cubre el país está a punto de vivir otra revolución, esta vez impulsada por las fuentes de energía renovables y por la llegada del coche eléctrico. Y para que la red pueda resistir a los cambios que vienen, organismos de investigación y empresas de todo el país se aplican en investigar, desarrollar e innovar.
Coche eléctrico y sistema de recarga en Gijón (Proyecto Living Car). Fotografía cedida por L. S. M.
Investigadores de la UAM y de otros centros españoles de investigación han desarrollado nuevas metodologías de análisis para realizar un seguimiento sistemático de la contaminación ambiental presente en suelos y aguas de antiguas zonas mineras de Asturias, con el objetivo de evaluar el grado de contaminación residual y buscar actuaciones correctivas.
A la derecha, uno de los ratones con autofagia reducida, con la cabeza inclinada e incapaz de nadar. A la izquierda, un ratón normal.
La Transplantation Society (TTS) y la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) de España han obtenido el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional que se ha fallado este mediodía en Oviedo. El Ministerio de Sanidad y Política Social agradece el reconocimiento por la labor que viene desarrollando la ONT desde hace más de 20 años, tanto en España como en el ámbito internacional.
Herminio Sastre, Viceconsejero de Ciencia y Tecnología de Asturias, en la presentación de NANOfutures en Gijón. Foto: FICYT.
Un asistente a la puesta en marcha de NANOfutures. Foto: FICYT.