Las marcas epigenéticas son un proceso clave en las instrucciones a los genes para expresarse y formar el plegamiento cerebral. Un nuevo estudio, publicado en Science Advances, indica cómo una proteína llamada Cux2 tiene la capacidad de alterar el patrón de dicha rugosidad en hurones e inducirlo en ratones.
La Unión Europea finaliza este mes la financiación del monumental 'Human Brain Proyect' (Proyecto Cerebro Humano), uno de los mayores retos de la neurociencia del inicio de siglo. Gracias a la interacción entre esta disciplina, la informática, la ingeniería y las matemáticas, esta iniciativa internacional ha intentado modelar un cerebro virtual para lograr avances tecnológicos en medicina.
Investigadores del Instituto de Neurociencias de Alicante han identificado por primera vez una señal molecular clave para la expansión de la corteza cerebral y la adquisición de su compleja arquitectura durante la evolución de los mamíferos. El hallazgo muestra que esta evolución no necesitó la aparición de nuevos genes, sino la regulación fina de los mecanismos genéticos ya existentes en los reptiles.
Con la falta de consciencia en el sueño profundo la actividad de millones de neuronas viaja por la corteza cerebral. Este fenómeno, conocido como oscilaciones lentas, está relacionado con la consolidación de la memoria. El proyecto europeo llamado SloW Dyn, dirigido por científicos españoles, ha permitido descubrir anomalías en esta actividad en ratones con un deterioro similar al alzhéimer.
Los cannabinoides producidos y liberados por nuestro sistema nervioso son esenciales en el funcionamiento de la corteza cerebral, ya que favorecen la plasticidad sináptica, la base celular de los procesos de la memoria y el aprendizaje. Así concluye un nuevo estudio, llevado a cabo en ratas y publicado en la revista Cerebral Cortex.
Investigadores de la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla y la Universidad Autónoma de Barcelona han identificado en ratas un patrón neuronal, unas señales eléctricas del cerebro asociadas a comportamientos cognitivos, con el que se puede generar un estímulo táctil en un iPad. Los resultados se pueden aplicar en interfaces cerebro-máquina, sistemas de gran interés para que personas con dificultades físicas puedan comunicarse con el exterior.
Una investigación con participación española ha descubierto un mecanismo hasta ahora desconocido que permite a la corteza cerebral plegarse formando surcos, lo que aumenta su superficie y le da el aspecto ‘arrugado’ característico de nuestra especie y otros mamíferos, como los primates. El trabajo se publica esta semana en la revista Cell.
Un equipo de neurocientíficos ha creado un mapa preciso de 180 áreas de la corteza cerebral –97 de ellas desconocidas hasta ahora– usando un software que ha incorporado datos procedentes de múltiples tipos de imágenes de resonancia magnética. Según los autores, los hallazgos podrían aplicarse en mejorar la cirugía del cerebro y en la investigación de la evolución cognitiva humana.
Investigadores de Cataluña han identificado por primera vez las alteraciones del circuito neuronal que afectan a la fisiología de la corteza cerebral y que podrían ser las causantes de lo déficits cognitivos en el síndrome de Down. El trabajo explica cómo un gen vinculado con el síndrome de Down se asocia a cambios en los ritmos cerebrales en la corteza, la región responsable del razonamiento, lenguaje y comportamiento social.
Un equipo científico estadounidense ha trabajado a contrarreloj durante un mes para concluir que el virus del Zika infecta un tipo de célula madre neural que da lugar a la corteza cerebral. Aunque el trabajo no demuestra la relación directa entre el virus y la microcefalia, los ensayos de laboratorio han encontrado que las células madre infectadas, llamadas precursoras neuronales corticales, se convierten en fábricas para la replicación viral.