La mayoría de los mamíferos tienen sus gónadas masculinas en el escroto para conservarse frescas. Solo los afroterios, como los elefantes, guardan estos órganos blandos en el interior del abdomen. El rastreo de genes antiguos permite escribir la historia evolutiva de su posición estratégica.
Investigadores del Instituto de Neurociencias de Alicante han identificado por primera vez una señal molecular clave para la expansión de la corteza cerebral y la adquisición de su compleja arquitectura durante la evolución de los mamíferos. El hallazgo muestra que esta evolución no necesitó la aparición de nuevos genes, sino la regulación fina de los mecanismos genéticos ya existentes en los reptiles.
Un equipo internacional de investigadores ha descubierto que estas aves recrean mentalmente los utensilios que emplean sus compañeras para conseguir alimento y son capaces de desarrollarlos por sí mismos con mejoras que se difunden a otras poblaciones, algo jamás visto antes en el mundo animal.
Un estudio demuestra la relación entre ingerir productos con carbohidratos de un elevado índice glucémico –como los cereales refinados, el pan y las pastas blancas y los dulces– y un mayor riesgo de sufrir una fractura osteoporótica.
Investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos y del CSIC han mejorado la programación de un polímero autorreparable con capacidad de recuperar su forma inicial. Se puede aplicar en sectores como la automoción, el aeroespacial o el biomédico.