Científicos de la Universidad de Copenhague, liderados por el español Guillermo Montoya, han descrito cómo funciona una de las tecnologías CRISPR, denominada Cas12a, a nivel molecular. Este avance permitirá afinar el proceso de edición genética para lograr solo los efectos deseados.
Un equipo científico chino asegura haber creado los primeros bebés modificados genéticamente con la herramienta CRISPR. Los investigadores habrían utilizado esta técnica en dos gemelas para eliminar el gen CCR5 con el objetivo de hacerlas resistentes al VIH, la viruela y el cólera. Los resultados no se han podido comprobar porque no han sido publicados en ninguna revista científica.
Un equipo científico chino ha obtenido ratones sanos de dos hembras usando células madre y edición de genes específicos. Las 29 crías tuvieron luego su propia descendencia por reproducción normal. Los investigadores usaron una técnica similar con dos padres, pero los recién nacidos solo sobrevivieron un par de días.
Científicos de la Universidad de Copenhague, liderados por el español Guillermo Montoya, están investigando las características de diferentes bisturíes moleculares de CRISPR para tratar de avanzar en lo que llaman la ‘navaja suiza’ de la edición genética. El equipo ha logrado visualizar las estructuras atómicas de las proteínas Cpf1 y Cas9 y ha comprobado sus particularidades a la hora de cortar el ADN, que las hacen idóneas para diferentes usos en el corta-pega genético.
¿Qué opina la sociedad sobre CRISPR? Un equipo de investigación ha analizado las opiniones de los ciudadanos de diez países, entre ellos, España. El estudio revela que una amplia mayoría está a favor de editar genes para tratar dolencias; pero existen reticencias al uso de esta tecnología para mejorar las capacidades del individuo.
Científicos de una firma de EE UU están tratando por primera vez editar el ADN dentro del cuerpo de un paciente, alterando su código genético de manera permanente con una técnica de corta-pega genético diferente a CRISPR, llamada nucleasas con dedos de zinc. El objetivo es curar un trastorno genético llamado síndrome de Hunter, padecido por un hombre de 44 años. Habrá que esperar tres meses para saber si la modificación genética ha sido un éxito, según informa la agencia The Associated Press.
Dos estudios recién publicados recogen dos nuevos logros del corta-pega genético. La revista Science revela una nueva herramienta, llamada REPAIR, que edita ARN en lugar de ADN y es capaz de tratar patologías sin modificar permanentemente el genoma. Otro trabajo de la revista Nature muestra el papel de CRISPR-Cas9 para editar mutaciones sin errores. Para utilizarlas en humanos, habrá que esperar a reducir al mínimo los posibles efectos no deseados.
Varios laboratorios norteamericanos, surcoreanos y chinos, coordinados por el prestigioso embriólogo y especialista en primates Shoukhrat Mitalipov, de la Oregon Health & Science University en EE UU, acaban de generar 142 embriones humanos para investigar en ellos la posibilidad de corregir la mutación en un gen de la miocardiopatía hipertrófica mediante las herramientas CRISPR. A pesar de los sorprendentes hallazgos, la edición genética en embriones no debería ser por el momento un procedimiento de elección.