Tras la fusión de las dos estrellas de neutrones que generaron las famosas ondas gravitacionales registradas en la Tierra en 2017 se formó estroncio, un elemento pesado utilizado en los fuegos artificiales. Un equipo internacional de astrónomos lo ha confirmado ahora con la ayuda de un instrumento del Observatorio Europeo Austral, en Chile. El descubrimiento proporciona una de las piezas que faltaban al rompecabezas de la formación de elementos químicos.
Científicos de la Universidad Autónoma de Barcelona han estudiado los niveles de estroncio y cesio radioactivo en la costa de Japón durante los últimos años y han comprobado que los niveles de radioactividad en agua son entre 10 y 100 veces mayores que los registrados antes del accidente de Fukushima, que ocurrió justo hace cinco años. Los niveles más altos localizados cerca de la central nuclear indican una fuga contínua de agua contaminada con esos radioisótopos hacia el océano Pacífico.
Científicos de la Universidad de Barcelona han presentado un nuevo mineral para la ciencia descubierto en la región turca de Anatolia: la fontarnauita, una sal con sodio, estroncio, potasio y calcio. El nombre se ha puesto en memoria de Ramon Fontarnau, jefe de la Sección de Caracterización de Materiales de esta universidad catalana.