Los partidos socialdemócratas comenzaron antes que la derecha a favorecer la presencia de las mujeres en los parlamentos en el siglo XX. Siguiendo esta tesis y utilizando datos de 138 elecciones españolas, una investigación de la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad Autónoma de Madrid ha demostrado que el PSOE y el PP contribuyen de forma diferente a la feminización parlamentaria: el primero facilita la entrada de las mujeres y el segundo favorece su permanencia.