Los mecanismos bioquímicos de la fotosíntesis de las plantas han inspirado a científicos de la Universidad Autónoma de Madrid para diseñar un material de fibras de carbono, barato y accesible, que podría facilitar la producción masiva de hidrógeno. Este elemento es un candidato alternativo a los combustibles fósiles como fuente energética.
En un mercado cerrado y tradicional como es el de los instrumentos musicales, algunos valientes se están atreviendo a innovar. Entre ellos, dos jóvenes ingenieros españoles que desarrollan cajas de percusión con materiales que combinan fibras químicas –como las utilizadas en la fabricación de chalecos antibalas– y de carbono. Una de estas cajas, de su marca Rasch, fue reconocida el año pasado como la segunda mejor del mundo en el Nashville Drum Show, el festival internacional más importante del sector.
Con túneles de longitud creciente gracias a los avances en ingeniería, los fabricantes de sistemas de ventilación deben responder a nuevos retos. Es lo que ha hecho Zitrón, compañía que produce los primeros álabes de fibra de carbono para ventilación de mina. Ahora planean adaptarlos a las exigentes condiciones de un posible incendio bajo tierra. Los principales clientes de esta firma asturiana son las grandes minas rusas.
El corredor sudafricano Oscar Pistorius competirá mañana en los Juegos Olímpicos de Londres en la carrera de relevos de 4x400. El pasado domingo quedó eliminado en las semifinales de 400 metros con un tiempo de 46,54 segundos. Sean cuales sean los resultados de esta última prueba, Pistorius ya ha hecho historia al ser el primer atleta con las piernas amputadas en competir en unas olimpiadas. Mientras tanto, continúa el debate científico sobre si sus prótesis de fibra de carbono le otorgan alguna ventaja en la competición.
La aplicación de nuevos materiales se produce habitualmente en campos como la biomedicina o la construcción. No obstante, hay otros sectores donde su utilización supone una buena oportunidad de negocio. Es el caso del material deportivo, un campo en el que han decidido iniciar un proyecto emprendedor los hermanos Víctor y Miguel López Lopéz, ambos ingenieros de la Universidad de Valladolid. Su proyecto se centra en la fabricación de palas de piragüismo con CFRC (siglas de Composite Reforzado con Fibra de Carbono).
Ventilador metálico en los talleres de Zitrón en Porceyo (Gijón, Asturias).