Uno de cada cuatro casos de hemorragia subaracnoidea, una manifestación especialmente grave de patología cerebrovascular, no se diagnostica inicialmente, según un estudio que ha publicado la revista Stroke. Esto influye directamente sobre las posibilidades de recuperación de los pacientes ya que el mal diagnóstico incrementa un 20 % las probabilidades de tener un mal pronóstico.
Investigadores del Centro Nacional de Aceleradores y el Hospital Universitario Virgen del Rocío han desarrollado un modelo experimental en ratas que, mediante un radiofármaco y técnicas tomográficas, permite localizar zonas del cerebro que se han quedado sin oxígeno tras una hemorragia subaracnoidea. El avance ayudará en el manejo terapéutico de esta grave patología.