Los costos ocultos del desarrollo de la inteligencia artificial generativa (en inglés, GenAI) van más allá de lo económico o lo medioambiental: también tienen un fuerte impacto social.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid han calculado los impactos ambientales de una red de huertas periurbanas en Zaragoza, entre los que destaca el uso de combustible, plásticos y electricidad. Los resultados del trabajo ayudarán en la toma de decisiones para conseguir la sostenibilidad de este tipo de sistemas de producción.