Los cristales líquidos revolucionaron la tecnología en su día al utilizarse para la comercialización de pantallas LCD. Lejos de ser ese su último uso, un equipo internacional de investigadores con participación de la Universidad Complutense de Madrid ha desarrollado una nueva aplicación aprovechando su comportamiento luminiscente que puede ser usado en sanidad, alimentación, industria o ciberseguridad.
La colaboración entre un equipo de investigadores de la Universidad de Aveiro, y un equipo del Instituto de Ciencia de Materiales de Aragón (CSIC-UNIZAR), ha permitido desarrollar un nanotermómetro luminiscente con propiedades únicas que nos permitirá estudiar la bioquímica de micro-procesos térmicos que ocurren dentro de la célula. Los resultados de esta colaboración acaban de aparecer en Advanced Materials, una de las revistas científicas de mayor prestigio en ciencia de materiales.