El equipo suizo que ha desarrollado el nuevo dispositivo ya había logrado, con un sistema similar, que personas con paraplejia volvieran a caminar. Ahora lo ha aplicado con éxito a un francés de 62 años que tenía graves problemas de movilidad, causados por la enfermedad de Parkinson crónica. El neuroimplante ha permitido que camine con fluidez y que pueda subir y bajar escaleras sin caerse.
Ingenieros de la Universidad de Stanford (EE UU) han desarrollado un exoesqueleto de tobillo capaz de adaptarse a cada persona, de tal forma que pueda andar a mayor velocidad y gastar menos energía. El prototipo se ha probado con éxito en condiciones reales, en la calle, y supone un nuevo paso hacia los futuros dispositivos de marcha asistida que podrán utilizar personas con problemas de movilidad.
El Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-Moon, junto a Al Gore, ex vicepresidente de los EE UU y Premio Nobel, la primatóloga Jane Goodall, Bill de Blasio, alcalde de la ciudad de Nueva York y Ségolène Royal, ministro de Medio Ambiente, Desarrollo Sostenible y Energía de Francia. / UN Photo/Mark Garten.