Los alimentos de origen vegetal son buena fuente de fibra dietética, vitaminas y minerales, además de sustancias fitoquímicas beneficiosas. Por ello, se recomienda su consumo diario para prevenir el cáncer, la diabetes, las enfermedades cardíacas y la obesidad, así como para contrarrestar las carencias de micronutrientes. Y aunque una dieta saludable no pueda protegernos de la covid-19, sí puede evitar los factores de riesgo que llevan a una peor evolución de la enfermedad.
Año Internacional de las Frutas y las Verduras
Junto al conocimiento del genoma de las plantas que nos dan de comer, dos expertos proponen fijarse en las pinturas artísticas para hacer un seguimiento de la historia moderna de frutas, verduras y semillas. Los aficionados a los museos están invitados a colaborar.
Seguir una dieta mediterránea tradicional puede reducir el consumo hídrico, un descenso que podría llegar hasta la mitad si esta dieta fuera vegetariana. Es una de las conclusiones de una investigación internacional en la que participa la Universidad Complutense de Madrid, y con la que se han analizado las pautas de consumo y alimentación de los ciudadanos de 13 ciudades europeas.
Las personas de 80 años en adelante son muchas veces olvidadas en las encuestas y estudios de población, especialmente, porque su número y participación en este tipo de investigaciones es normalmente menor respecto a ancianos más jóvenes. A pesar de su escasa presencia, sus problemas de salud son mayores y repercuten en una baja calidad de vida. La nutrición es un pilar clave para conseguir un envejecimiento saludable y aquí juega un papel fundamental la dieta mediterránea, que muchos de ellos no siguen de forma adecuada.
Investigadores de la Universidad de Granada han demostrado que la fritura en aceite de oliva virgen extra es la técnica culinaria que más aumenta la saludable fracción fenólica de las hortalizas, como los tomates, patatas, calabazas y berenjenas. El resultado supone una mejora de estos productos de la dieta mediterránea durante su proceso de cocinado.
Los vegetales que compramos en la frutería en realidad siguen vivos. Por eso, investigadores de la Universidad de Rice (EEUU) sugieren, en el último número de la revista Current Biology, que la forma en que se almacenan los productos y el momento en que se consumen podrían tener consecuencias reales sobre su valor nutricional y en la salud humana.
Un laboratorio valida cerca de 290 plaguicidas en 24 horas.
Reconstrucción de un neandertal en el Museo de Historia Natural de Aix en Provence (Francia).