David Bueno, Premio Europeo de Divulgación Científica Estudi General 2010

“Soy un firme defensor de acercar la ciencia a la sociedad”

Tanto la ciencia como la divulgación científica corren por sus venas. Y eso se nota. David Bueno, profesor del Departamento de Genética de la Universidad de Barcelona (UB) y socio de la Asociación Catalana de Comunicación Científica (ACCC), ha conseguido el Premio Europeo de Divulgación Científica Estudi General 2010 por su libro El enigma de la libertad. Una perspectiva biológica y evolutiva de la libertad humana. A la espera de encontrar el texto en las librerías, el científico responde a nuestras preguntas.

David Bueno
Además del libro por el que ha sido premidao, David Bueno tiene otro sobre reflexiones de la biología contemporánea que publicará en breve. Foto: UB.

¿Qué representa para ti haber ganado este galardón?

Es un reconocimiento público a la labor divulgadora que desde hace años hago en varios medios, no siempre suficientemente bien valorada y reconocida a pesar de la importancia social que la ciencia tiene en la sociedad. También representa un premio al esfuerzo de intentar aproximar la ciencia al gran público, dado que la redacción de un libro de estas características es una tarea larga y compleja que se suele hacer en el tiempo de ocio. Y, finalmente, también es un indicativo de la importancia que la sociedad da al conocimiento y a la ciencia, la cual, no siempre encuentra reflejada de la forma adecuada en los medios.

Háblanos un poco del libro...

Lo he ido cociendo poco a poco, a fuego lento, durante algo más de tres años, a partir de todo un conjunto de datos que han ido siendo publicados progresivamente en varias revistas científicas y que se podría pensar que indican la no existencia de un auténtico libre albedrío. Sin embargo, hay dos datos que hacen pensar que, como mínimo, podemos disfrutar de un cierto grado de libertad: por un lado, el hecho de que tengamos una mente creativa, y para poder crear hay que disponer de un cierto grado de pensamiento libre, innovador; y por otra lado, el hecho de que a menudo tengamos una sensación subjetiva de libertad. Estos dos hechos me han obligado replantear los datos que se tienen sobre el comportamiento humano en clave biológica y evolutiva.

¿A qué público va dirigido?

Está pensando en todos los públicos, no sólo en un público especializado, dado que soy un firme defensor de la necesidad de acercar la ciencia al conjunto de la sociedad. Por eso he rechazado los términos complejos y las explicaciones enrevesadas, sin faltar al más estricto rigor científico. Yo diría que cualquier persona con un nivel de formación equivalente a la secundaria actual podrá disfrutar de su lectura, dando por hecho que esté interesada en el tema.

¿Cuál es su objetivo?
El objetivo es entender cómo nuestras bases biológicas nos permiten ser no sólo homínidos, es decir, entes biológicos del grupo de los vertebrados, la clase de los mamíferos y el orden de los primates, sino también humanos, entes conscientes con todos los atributos mentales de la humanidad. Y, de todos estos atributos, probablemente los más peculiares sean la autoconciencia y la capacidad creativa, y la libertad y el sentimiento de libertad que de estos procesos mentales se deriva, una cuestión que ha preocupado a la humanidad como mínimo desde que se tiene constancia histórica.

¿Por qué crees que hoy en día es importante la divulgación científica?

El motivo está clarísimo: vivimos en un mucho donde la ciencia y la técnica tienen un impacto capital, en todos los aspectos de nuestra vida, en el día a día. Sólo hace falta echar un vistazo a nuestro alrededor. Y la ciencia cada vez impregna más todas las vertientes de la cultura humana.

Eres profesor del Departamento de Genética de la UB y diriges un equipo de investigación. Imagino que no habrá sido nada fácil llegar hasta donde estás...

No me gusta mucho la dicotomía fácil - difícil. Me ha hecho falta mucho esfuerzo, mucha perseverancia, mucha dedicación y, sobre todo, mucha ilusión. Pero cuando se hace a gusto, no se puede decir que haya sido difícil.

¿Qué dirías a los jóvenes investigadores que acaban de empezar y se encuentran con un camino tan complicado?

Que la complicación reside, sobre todo, en su mente. Que se marquen prioridades y que trabajen con ilusión, que sean tenaces y que nunca les de miedo el fracaso, porque el fracaso también reside únicamente en la mente de quien lo oye. Que no olviden nunca su humanidad, ni con ellos mismos y hacia los demás, y que actúen con el máximo sentimiento de libertad. El resto ya va llegando.

¿Estás escribiendo algo nuevo?

Por supuesto. Creo que lo llevo en la sangre. Aparte de las colaboraciones que hago en periódicos, tengo ya un libro terminado sobre reflexiones de la biología contemporánea, que espero que salga publicado relativamente pronto, y un par de trabajos más pero que hoy por hoy están justo al principio.

Fuente: ACCC
Derechos: Creative Commons
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