Investigan el poder de decisión en el bienestar social

El estado de bienestar consiste en alcanzar la satisfacción en todos los ámbitos de la vida (salud, infraestructuras, políticas sociales, entre otras). De esta forma, la investigación se plantea en tres partes: primero se quiere estudiar el modelo de racionamiento aplicado al diseño de políticas recaudatorias de impuestos; después, se analizará el impacto de las desigualdades en el bienestar de los ciudadanos; por último, se investigará en qué medida la formación de coaliciones políticas favorece o no la implementación de políticas públicas que inciden en mejoras de bienestar social, según M. Socorro Puy, investigadora principal del trabajo.

El proyecto consta de una parte teórica, basada en la Teoría Microeconómica, que tiene como propósito la formalización de modelos económicos en los que analizar las tres fases descritas anteriormente. La metodología que se utilizará en esta parte tomará como referencia el método axiomático (utilizado en la Teoría de la Elección Social, que aboga por la toma de decisiones colectivas a partir de las preferencias de cada individuo de la sociedad) y en la Teoría de formación de coaliciones (englobada dentro de la Teoría de Juegos, que estudia el comportamiento estratégico de los jugadores en cada situación). También consta de una parte empírica, en la que estos investigadores proponen el diseño de encuestas y cuestionarios con los que estimar algunas de las medidas desarrolladas en la fase teórica.

Este proyecto de excelencia cuenta con la colaboración de economistas y responsables de políticas públicas, lo que permitirá identificar las peculiaridades de los problemas en instituciones, en España en general y en Andalucía en particular, con la finalidad de conseguir un reparto presupuestario y una negociación de políticas que cumplan los objetivos concretos anunciados públicamente a la sociedad.

Así, estos investigadores esperan que su trabajo tenga “implicaciones directas en la mejora de problemas de asignación como el reparto presupuestario, la toma de decisiones sobre políticas sociales y su incidencia en la salud, y la negociación de políticas de los partidos”.

Respecto a la primera premisa, los científicos pretenden ofrecer un punto de vista adicional a la controversia actual sobre el diseño de transferencias a las comunidades autónomas, como resultado de la aprobación de los nuevos estatutos regionales. En la segunda parte del proyecto examinarán la correlación entre salud y renta, y su impacto sobe la distribución de la renta equivalente a salud para evaluar las políticas públicas. Finalmente, en la tercera fase analizarán la formación de gobiernos de coalición, de modo que a través del diseño de mecanismos se forme una coalición estable, lo que aseguraría la formación inmediata de gobierno tras las elecciones.

Por tanto, el objetivo central del estudio ‘Incidencia de las decisiones públicas en el bienestar social’, incentivado por la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa con 222.999,84 euros, es analizar el papel de las decisiones públicas para lograr el bienestar de los ciudadanos. Pero hasta llegar a dicho fin, se deben cumplir objetivos previos como el análisis desde un punto de vista normativo de los métodos que posibiliten racionalizar el gasto público entre las distintas partidas de políticas públicas; explorar las sinergias entre políticas sociales, distribución de la renta y distribución de salud; el último paso es estudiar los problemas de estabilidad de los gobiernos de coalición, comenta la Sra. Puy.

En el caso de la reflexión de la relación entre distribución de la renta y salud, se desarrollarán tres fases diferenciadas. “En la primera se realizará un modelo concreto que resolveremos teóricamente”, afirma la investigadora principal. En la segunda fase se elaborarán encuestas de opinión en las que los agentes encuestados indiquen su estado de salud, así como su calidad de vida, su renta y sus expectativas de calidad de vida futuras. Éstas se efectuarán en distintas poblaciones de Francia. Ya, en la última fase, los investigadores comprobarán si los datos recogidos en las encuestas son coherentes con la predicción del modelo teórico.