La deuda que tiene el Estado con las compañías eléctricas por el déficit de tarifa podría llegar a los 30.000 millones de euros a finales de 2012 si no se toman “medidas drásticas”, como una subida en el precio de la factura de la luz, según ha señalado el presidente de la patronal UNESA, Eduardo Montes, durante una jornada de la Sociedad Nuclear Española (SNE).
La deuda que tiene el Estado con las compañías eléctricas por el déficit de tarifa podría llegar a los 30.000 millones de euros a finales de 2012 si no se toman “medidas drásticas”, como una subida en el precio de la factura de la luz, según ha señalado el presidente de la patronal UNESA, Eduardo Montes, durante una jornada de la Sociedad Nuclear Española (SNE).
“La única forma que existe, o la más ortodoxa, de resolver el déficit de tarifa es que el incremento de la factura eléctrica lo compense, porque si no, es pan para hoy y hambre para mañana”, ha dicho a SINC Eduardo Montes, presidente de la Asociación Española de la Industria Eléctrica (UNESA) durante la rueda de prensa de la jornada sobre centrales nucleares organizada este jueves por la SNE.
Como consecuencia del déficit tarifario (diferencia entre los ingresos que tiene el sistema eléctrico y sus costes, sistemáticamente mayores por las obligaciones que por ley deben asumir las eléctricas), el Estado debe hasta ahora 24.000 millones de euros a las cinco compañías que integran UNESA (Endesa, Iberdrola, Gas Natural Fenosa, HC Energía y Eon España).
Por Real Decreto se había fijado un máximo para este déficit en 2012 de 1.500 millones de euros, pero los cálculos ya apuntan hacia los 5.700 millones de euros. “Si no se toman medidas drásticas, nos podemos ver con un déficit acumulado de tarifa al final de este año de cerca de 30.000 millones de euros, lo que representa el 3% del PIB y el doble del efecto que han tenido las medidas bien tomadas por el Gobierno en los primeros Consejos de Ministros”, señaló Montes.
Según la Comisión Nacional de la Energía, la factura eléctrica media de una familia española está en torno a los 45 euros por familia. De esa cantidad, la mayoría son costes regulados, que no tienen que ver con el suministro eléctrico, ha recordado el experto.
“¿Por qué cuando llega el primero de enero todos sabemos que sube la inflación y repercute en el transporte o el alquiler, por ejemplo, o sube mucho más la gasolina y nadie dice nada, y sin embargo la energía eléctrica parece ser intocable?”, se ha preguntado Montes. “Yo creo que es un error muy serio”.
Durante la rueda de prensa, en la que también participaron la presidenta de SNE, Lola Morales, y el vicepresidente del Parlamento Europeo, Alejo Vidal-Quadras, se ha destacado que la caída del consumo eléctrico en 2011 ha sido de casi el 2% debido a la crisis económica, y que la demanda de electricidad ha retrocedido a los niveles de 2005.
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