El cyberbullying es un fenómeno emergente cuya prevalencia está aumentando entre las personas adolescentes. Una investigación de la Universidad de Valencia (UV) constata, a partir de una muestra realizada en esta comunidad, que entre un 25% y un 29% de los adolescentes han sido acosados durante el último año a través del móvil o de internet.
“Los datos de nuestro estudio indican que la victimización a través de las tecnologías afecta al 24,6% de los adolescentes, en el caso del teléfono móvil, y al 29% en el caso de internet. La duración de este acoso es para la gran mayoría menor o igual a un mes”, declara a SINC Sofía Buelga, coautora del estudio e investigadora de la UV.
La investigación, que se publica en el último número de la revista Psicothema, se realizó a través de una encuesta en 11 centros valencianos de Enseñanza de Educación Secundaria Obligatoria durante 2009. Respondieron 2101 adolescentes (1.098 chicos y 1.003 chicas) de entre 11 y 17 años.
Según los expertos, la duración del acoso tecnológico es menor de un mes para la mayoría de los adolescentes. “Del total de la muestra, un 17,4% han sido acosados por el móvil y, el 22,5% por internet”.
Aunque para la mayoría de los y las adolescentes, el cyberbullying es de corta duración existe un porcentaje “relativamente pequeño, pero importante” de personas adolescentes que han sido acosadas con una intensidad moderada (menos de una agresión por semana) y severa (más de una agresión por semana) más de tres meses. Un 4% entre 3 y 6 meses, y un 3% más de un año.
Cuando la intensidad del acoso es moderada y dura más de tres meses, el teléfono móvil es más utilizado. “Este resultado podría explicarse por la disponibilidad y centralidad que tiene el móvil en la vida. Estudios previos señalan que los adolescentes de entre 12 y 14 años han tenido una media de tres teléfonos móviles y un 63% no lo apaga nunca”, explica Buelga.
Las alumnas de los primeros cursos, las más acosadas
“Los primeros cursos tienden a sufrir más cyberbullying que los últimos cursos, tanto por el móvil como por internet”, confirma la experta. El estudio indica que las chicas son más acosadas que los chicos en la mayoría de agresiones, sobre todo agresiones verbales, violación de la intimidad, difusión de rumores y exclusión social.
“Es muy importante concienciar a los jóvenes, ya que en muchas ocasiones no son conscientes de las repercusiones que tienen sus acciones”, demanda Buelga.
Diferencias con otros estudios
“Existen grandes diferencias de metodologías en los países y en las investigaciones sobre la prevalencia del acoso tecnológico. Estas desigualdades explican que la incidencia del acoso varíe según los trabajos entre el 5% y el 34%”, expone la experta.
Según la investigación EU Kids online, realizada este año en 25 países europeos, España está “ligeramente por debajo” de la media europea en lo que respecta al acoso a través de internet La media europea de acoso por internet es del 5%. Estonia y Rumania son los países con mayor incidencia.
Por otra parte, el último Informe del Defensor del Pueblo concluyó en 2007 que la prevalencia del acoso electrónico es del 5,5% entre escolares de Secundaria.
“Las tecnologías adquieren cada vez más protagonismo en la vida cotidiana. Por eso son necesarias medidas de educación en el uso responsable y positivo de estas”, concluye Buelga.
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Referencias bibliográficas:
Sofía Buelga, María Jesús Cava y Gonzalo Musitu. “Cyberbullying: Adolescent victimization through mobile phone and internet” Psicothema 22 (4): 784-789, noviembre de 2010.
EU Kids Online report, Risks and safety on the internet www.eukidsonline.net
“Violencia escolar: el maltrato entre iguales en la Educación Secundaria Obligatoria 1999-2006” (Nuevo estudio y actualización del informe 2000), Informe del Defensor del Pueblo (2007).
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Este tipo de violencia implica conductas dirigidas a mujeres por parte de uno o varios hombres desconocidos sin intención comunicativa. Tienen cariz sexual y su intención es la de degradar. Un estudio de la Universidad de Córdoba revela que el 98 % de mujeres encuestadas ha sufrido este tipo acoso en algún momento a lo largo de su vida.
Este concepto hace referencia a que, a menudo, se cobra más a las mujeres por productos y servicios comercializados expresamente para ellas. Ahora, una investigación de la Universidad Carlos III de Madrid y de IMDEA Networks muestra que las empresas anunciantes tienden a pagar más por mostrar anuncios online a las mujeres que a los hombres, especialmente en países con rentas altas.
