El Gobierno de Navarra, a través de la empresa pública Gestión Ambiental, Viveros y Repoblaciones de Navarra, S.A., lidera el proyecto europeo BIDUR, una iniciativa que tiene por objeto la mejora de los ríos Bidasoa y Urumea. El proyecto, en el que también participan la Diputación Foral de Guipúzcoa, Nekazal Ikerketa & Teknologia y el servicio de medio ambiente del Consejo General de Pirineos Atlánticos, se ha puesto en marcha en un acto que ha tenido lugar en el parque natural del Señorío de Bertiz
El proyecto tiene entre sus finalidades la restauración y prevención del riesgo de inundaciones en las cuencas de los ríos Bidasoa y Urumea, así como el ahorro en los consumos de agua y la mejora de la gestión piscícola. Para ello, plantea una gestión transfronteriza compartida de sus cuencas y, en concreto, la realización de un estudio sobre la situación de ambos ríos, el impulso de la cooperación entre las entidades públicas involucradas en la gestión del agua y trabajar en la permeabilización y restauración de los ríos, así como en la mejora de la gestión piscícola.
El plan está dotado con un presupuesto que asciende a los 2.344.077 euros, de los que 1.523.646 euros (65%) son aportados por la Unión Europea a través del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), 420.623 euros (18%) por el Gobierno de Navarra, y los restantes 399.808 euros (17%) por Nekazal Ikerketa & Teknologia, por parte de Guipúzcoa, y el Consejo General de Pirineos Atlánticos, por parte de Francia.
El proyecto tiene un calendario de ejecución inicial que se prolonga hasta finales de 2011. Su lanzamiento ha tenido lugar en Bertiz, en un acto en el que se ha firmado el inicio del proyecto y se han constituido los comités técnicos (disponibilidad del agua, permeabilización y restauración de cuenca, y mejora de la gestión piscícola) y de dirección que se encargarán de desarrollar y velar por la buena marcha del plan.
La liberación de dióxido de carbono a la atmósfera alcanzará un récord histórico en 2024, reflejando el avance insuficiente en la reducción del uso de combustibles fósiles y el cambio de uso del suelo. Según el informe Global Carbon Budget, el riesgo de superar el límite de 1,5 ºC en la temperatura global aumenta, mientras los sumideros naturales siguen bajo presión.
Investigadores del Instituto Geológico Minero del CSIC explican que, en eventos extremos como la DANA del pasado 29 de octubre, los materiales que arrastra la corriente aumentan los daños causados por las inundaciones.
