La Fundación para la Investigación y Prevención del SIDA (FIPSE) ha concedido a Rafael Ballester, profesor de Personalidad, Evaluación y Tratamientos Psicológicos y director de la Unidad de Investigación sobre Sexualidad y sida (UNISEXSIDA) de la Universitat Jaume I, una subvención de más de 200.000 euros para desarrollar un proyecto de investigación sobre aspectos psicosociales relacionados con el sida.
La investigación Estudio multicéntrico sobre la calidad de vida de las personas con VIH y la eficacia de una intervención psicológica para mejorarla reúne a 34 investigadores de siete universidades distintas (Universitat de València, Universidad Autónoma de Madrid, Universidad de Educación a Distancia, Universidad del País Vasco, Universidad de Burgos, Universidad de Murcia y la UJI), la Coordinadora Estatal de VIH-SIDA y seis hospitales de todo el territorio nacional, además de otras diez entidades que colaborarán con el proyecto.
Una de sus características es aglutinar a todos los agentes que trabajan con las personas con esta enfermedad: universidades, ONG y hospitales. De esta forma, se convierte en el proyecto más numeroso en cuanto a personal y dotación económica hasta la actualidad en España y será coordinado por el profesor del Departamento de Psicología Básica, Clínica y Psicobiología.
Un acto para formalizar el proyecto
El proyecto se iniciará en enero de 2010 y finalizará en diciembre de 2012. Rafael Ballester recibirá una certificación acreditativa en un acto que se realizará el 17 de noviembre de 2009 en el auditorio de CaixaFòrum en Madrid, con ocasión del X Aniversario de la Fundación para la Investigación y Prevención de la SIDA, y que contará con la presencia de la Ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez.
La Fundación para la Investigación y Prevención de la SIDA (FIPSE), en la que participa el Ministerio de Sanidad y distintos laboratorios farmacéuticos, financia el proyecto que tiene como principal objetivo analizar la calidad de vida de las personas infectadas con el VIH, así como los factores de los que depende esta calidad de vida y una vez detectadas, desarrollar un programa de intervención psicológica que se aplicará en todo el país para mejorar el estado emocional de los pacientes.