El conocimiento de la radiación solar que alcanza la superficie de la Tierra es un factor clave que afecta a campos como la agricultura, la ecología o la hidrología. Investigadores de la Universidad de Valladolid y de la Universidad Complutense de Madrid han desarrollado un método para estimar la radiación solar global diaria a partir de los registros mensuales.
Investigadores españoles y etíopes confirman el potencial alimenticio de la harina de tef, un cereal sin gluten que procede de Etiopía. Los científicos han profundizado en sus características físico-químicas y nutricionales y han analizado su aplicación a nuevos productos alimentarios. El tef es muy poco conocido y tiene una gran diversidad de variedades, escasamente caracterizadas.
Un estudio proteómico ha identificado nuevas proteínas claves en la adaptación de las plantas a las altas temperaturas. Este trabajo es clave puesto que en España este fenómeno, junto con la sequía, son los principales factores que influyen en la producción agrícola.
Entrega de las 90.000 firmas en el espacio de Generacionnes climáticas
El trabajo compara el aprendizaje humano y de ordenador en una amplia gama de conceptos visuales simples y caracteres escritos a mano seleccionados de alfabetos de todo el mundo. / Danqing Wang
El volumen de agua disponible en España se ha reducido un 20% en los últimos 25 años a causa del cambio climático. Paradójicamente, el riesgo de inundaciones seguirá creciendo en los próximos años, según las estimaciones de dos informes presentados ayer por la organización no gubernamental Ecologistas en Acción, en el marco de la cumbre del clima de París.
El mes de enero, con las raciones de legumbres recomendadas. / INNOVADIETA-UCM.
Oso polar Aurora de Greenpeace
El incremento de aridez predicho para finales de siglo XXI por los efectos del cambio climático disminuirá la abundancia y diversidad de las comunidades microbianas del suelo en las zonas áridas de la Tierra. Así lo sugiere un estudio internacional liderado por investigadores de la Universidad Rey Juan Carlos, que advierte sobre las posibles consecuencias negativas para la fertilidad del suelo en estas zonas secas.
Por la cantidad relativamente baja de vitamina C en el tomate, uno de los frutos de mayor consumo en la dieta mediterránea, investigadores andaluces han aumentado por primera vez esa proporción en un 15% y lo han logrado gracias a técnicas de ingeniería genética. Según el estudio, los científicos transfirieron el gen de la fresa, que tiene mayor contenido en este nutriente, a la planta del tomate para crear un producto con aporte extra de vitamina C y una mayor capacidad antioxidante.