"Busque, compare, y si encuentra algo mejor, cómprelo". Este fue uno de los eslóganes más famosos de la publicidad de hace dos décadas. Esta podría ser la regla que seguimos todos a raja tabla en el día a día, en cambio parece ser que no la recordamos lo suficiente. Aunque muchos podemos pensar que nuestros conocimientos nos protegen de algunos mensajes, la verdad es que hemos podido constatar que nos dejamos influir bastante por determinadas modas construidas con muchos colorines pero apoyadas en pocos, y a veces absurdos, argumentos.