Los resultados del Grupo de Trabajo I deI IPCC, el organismo encargado de evaluar los avances en el conocimiento sobre el cambio climático, se harán públicos mañana. Será el Quinto Informe de Evaluación, que apunta a una mayor certeza de la influencia humana como el factor que más contribuye a los cambios. España participa, por primera vez, desarrollando simulaciones climáticas, según explican a SINC los coordinadores españoles.
Un estudio de la Universidad de Oviedo evidencia por primera vez que el aumento del CO2 atmosférico provocó la subida de las temperaturas en un periodo más cálido que el actual y con un nivel de concentraciones de dióxido de carbono similar al esperado para finales de este siglo. El avance, publicado en Nature, ha sido posible al averiguar el historial de adaptación de las algas marinas a distintas concentraciones de CO2.
A los 7.880 kilómetros de costa que comprende el territorio español les une una característica común: el aumento de la temperatura superficial del agua. Este impacto es el responsable de que en Canarias se pueda ver al tiburón ballena de aguas cálidas, y de que en Baleares la posidonia esté en peligro.
Los efectos del calentamiento global en los alimentos son poco conocidos, a pesar del interés que pueden tener. Ahora, los registros de los atributos de las manzanas recogidos desde 1970 en dos huertos de Japón revelan que cada vez son menos ácidas y firmes, y su corazón se ha hecho más acuoso.
Un estudio señala que las precipitaciones y el aumento de la temperatura favorecen toda clase de violencia, ya sea personal como intergrupal, e incluso puede provocar cambios en los gobiernos y la caída de civilizaciones enteras. El aumento de 2 ºC que se prevé en las próximas décadas puede hacer que crezca hasta en un 50% el número de guerras civiles.
Un estudio de la Universidad de las Islas Baleares analiza el impacto que tendrá el calentamiento global en los destinos del litoral escogidos por los turistas españoles para sus vacaciones. Los investigadores aseguran que las provincias costeras del sur de España perderán competitividad frente a los de la costa cantábrica, que aumentarán su atractivo.
El impacto de un calentamiento del Ártico podría suponer un coste de 43,5 billones de euros, una cifra que equivale al tamaño global de la economía en 2012. Así lo refleja el informe que investigadores de la Universidad de Cambridge y la Rotterdam School of Management publican esta semana en Nature.
Un equipo de investigadores europeos, incluido un profesor de Ikerbasque, advierte en la revista Science que el uso de la tierra en Europa no es el más correcto. Según el estudio, el hecho de que la tierra se rija únicamente por mercados agrícolas se traduce en considerables costes financieros y medioambientales para las personas.
Steven Chu (derecha) y Mario Molina (izquierda) en la reunión de premios Nobel en Lindau / SINC