Investigadores de la Universidad de Alicante han fabricado nanomateriales de platino y carbono que esta semana viajarán a la Estación Espacial Internacional para ser utilizados como electrocatalizadores en un experimento. Forman parte de un dispositivo que estudiará la reacción de oxidación del amoniaco, dentro un proyecto de la NASA para obtener agua y energía de la orina de los tripulantes.
En un laboratorio de la Estación Espacial Internacional se ha logrado producir una materia exótica ultrafría que no es sólida, líquida, gas ni plasma. Este hito tecnológico permitirá investigar nuevos aspectos de la física fundamental con esta sustancia que se mueve entre el mundo clásico y el cuántico.
Los astronautas Robert Behnken y Douglas Hurley de la NASA han llegado este domingo a la estación espacial internacional a bordo de una capsula fabricada por la compañía SpaceX, un viaje que inaugura la nueva era de vuelos comerciales tripulados al espacio.
Después de su aplazamiento por el mal tiempo, la capsula tripulada Crew Dragon despega el sábado desde Florida en un cohete recuperable rumbo a la estación espacial internacional. A bordo viajan dos astronautas estadounidenses, los primeros que parten de su propio país desde hace nueve años.
En octubre de 2018, durante una tormenta eléctrica sobre el mar de las Molucas (Indonesia), se produjeron simultáneamente dos violentos fenómenos atmosféricos: un estallido de rayos gamma terrestre y un enorme anillo de luz conocido como ‘elfo’. Justo en ese momento pasaba por encima la estación espacial internacional y registró la relación de los dos fenómenos. Los datos se publican ahora en la revista Science.
Este 29 de marzo estaba previsto que las astronautas estadounidenses Christina Koch y Anne McClain realizaran el primer paseo espacial exclusivo de mujeres. Sin embargo, la NASA ha reconocido que falta un torso de talla mediana en uno de sus trajes, por lo que de momento el paseo lo hará Koch con un compañero varón.
Ella es ingeniera aeronáutica, celebridad del MIT y fue la subdirectora de la NASA durante la presidencia de Barack Obama. Él es arquitecto especializado en ambientes extremos. Además de navegar alrededor del mundo en su velero, este matrimonio diseña trajes ligeros y ceñidos que protegen a los astronautas de la microgravedad, imagina nuevas bases lunares y sueña con universidades en órbita.
De pequeño fue un mal estudiante, pero con el tiempo y esfuerzo llegó a comandar la Estación Espacial Internacional, en la que se convirtió en el estadounidense que más tiempo seguido ha permanecido en el espacio. El astronauta Scott Kelly lo cuenta en su libro Resistencia, que ha presentado esta semana en Madrid, donde también ha lamentado la escasa formación científica de la administración Trump.