Las sondas Mars Express de la ESA y Mars Reconnaissance Orbiter de la NASA han encontrado pruebas de la existencia de acuíferos subterrános en Marte durante sus primeros miles de millones de años. Los testigos son rocas hidratadas del subsuelo que emergieron por el impacto de meteoritos.
El rover de la ESA en el desierto de Atacama.
Espirales de lava en la corteza volcánica de Cerberus Palus, Marte.
La misión Mars Express de la Agencia Espacial Europea (ESA) ha facilitado nuevas imágenes de cadenas de cráteres en Marte, en la falda de uno de los mayores volcanes del sistema solar. Si el origen de estos cráteres fuera por el colapso de cavidades subterráneas, podrían haber resguardado posibles microorganismos de las condiciones extremas de la superficie marciana.
A dos metros bajo tierra en el desierto de Atacama existe un “oasis” de microorganismos. Investigadores del Centro de Astrobiología (INTA-CSIC) y de la Universidad Católica del Norte, en Chile, lo han encontrado en sustratos hipersalinos gracias a SOLID, un detector de signos de vida que se podría utilizar en ambientes parecidos del subsuelo de Marte.
Un nuevo estudio de investigadores europeos y estadounidenses liderado desde el Instituto de Planetología y Astrofísica de Grenoble (Francia) refuerza la teoría que plantea la existencia de un antiguo océano en el hemisferio norte de Marte: el Oceanus Borealis, un tema que ha generado un intenso debate entre la comunidad científica. Los nuevos resultados se basan en un estudio de los sedimentos marcianos con el radar MARSIS del orbitador Mars Express de la Agencia Espacial Europea (ESA).
Mapa topográfico de Marte generado por la Mars Global Surveyor (NASA/JPL). Las zonas azules son las más bajas y corresponden al posible antiguo océano del hemisferio norte.
Investigadores del Centro de Astrobiología (CAB, INTA-CSIC) han identificado 30 nuevos genes en microorganismos de río Tinto (Huelva), un entorno muy ácido y con metales pesados. El hallazgo podría ser de interés en procesos de descontaminación, industriales o en biominería. Científicos del CAB también han partido esta semana para estudiar microorganismos en otro ambiente extremo de la Tierra: la Antártida.
Los científicos rusos no sospechaban el trágico destino de la sonda Fobos-Grunt cuando la preparaban antes de su lanzamiento.