El buque de investigación nipón Chikyu. / IODP /jamstec
Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha medido con una resolución sin precedentes la deformación que precede a un sismo en el Norte de Chile. Según sus resultados, la estructura de la placa superior en la zona de subducción controla dichos sismos.
Identificar y cartografiar la huella geológica de los deslizamientos submarinos causados por un terremoto de magnitud 6,2 en la escala de Richter, en abril de 2007 en la zona del fiordo de Aysén (Chile), es el objetivo principal de la campaña oceanográfico DETSUFA, que lleva a cabo el Grupo de Investigación Consolidado (GRC) Geociencias Marinas de la Universidad de Barcelona del 4 y 17 de marzo a bordo del buque oceanográfico BIO Hespérides.
Consecuencias del tsunami de Japón el pasado mes de marzo. Imagen: Warren Antiola.
Desde la creación del sistema de alerta tsunami en el Atlántico Noreste, el Mediterráneo y sus mares adyacentes en noviembre de 2005 bajo los auspicios de la Comisión Oceanográfica Intergubernamental (COI) de la UNESCO, todavía no se había hecho ninguna prueba. El próximo 10 de agosto, los 31 países participantes serán testigos del primer mensaje que se enviará desde Turquía.
La revista Science publica esta semana tres estudios que intentan comprender el comportamiento del seísmo que se produjo el pasado 11 de marzo en la costa oriental de Japón. El movimiento de tierra provocó un tsunami devastador que causó más de 20.000 muertes y desencadenó un desastre nuclear en Fukushima. Pero los científicos alertan de la posibilidad de que se produzca un terremoto similar o mayor en el futuro.
Las matemáticas pueden ser una buena herramienta para levantar edificios resistentes a tsunamis tan potentes como el registrado recientemente en Japón. El ingeniero Eugenio Oñate (Valencia, 1953), director del Centro Internacional de Métodos Numéricos en Ingeniería (CIMNE), aplica los cálculos numéricos para mejorar la seguridad de las construcciones frente a la fuerza de agua en su proyecto SAFECON, premiado con 2,5 millones de euros por el Consejo Europeo de Investigación (ERC).
El satélite 'Deimos-1', cuya Estación de Control se ubica en el Parque Tecnológico de Boecillo, en Valladolid, captó las primeras imágenes de la tragedia de Japón y se las envió a la ONU.