Investigadores del CSIC han hallado un nexo común en el origen de las atmósferas de la Tierra y del satélite de Saturno Titán. El análisis de los datos obtenidos por la misión Cassini-Huygens, un proyecto de la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Italiana, sugiere que la evolución química de ambas atmósferas estuvo marcada por el último gran bombardeo de asteroides y cometas durante la formación del sistema solar, hace unos 3.900 millones de años.
Un estudio estadounidense, liderado por investigadores de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de California (EE UU), demuestra que las poblaciones de pingüinos de la Antártida han disminuido hasta un 50% en las últimas tres décadas. Los autores señalan que este declive se debe al descenso de las cantidades de krills -los crustáceos de los que se alimentan-, provocado por el impacto del cambio climático.
Un estudio internacional, publicado hoy en Nature, demuestra que la duración de la estación calurosa ha descendido en los últimos 12.000 años. La razón: la cantidad de radiación solar durante la primavera ha disminuido. Esta investigación reúne por primera vez datos climáticos de la superficie marina de la Península Antártica, que ayudarán a saber cómo las capas de hielos responden al calentamiento global.
El Consejo de Ministros ha aprobado hoy dos Reales Decretos que actualizan y mejoran tanto la normativa de calidad del aire como la regulación de las actividades contaminantes de la atmósfera. El Gobierno pretende prevenir y reducir así los efectos nocivos de estos agentes sobre la salud y el medio ambiente.
El planeta GJ 1214b (en la imagen, una imrpesión artística) tiene un radio de unas 2,6 veces el de la Tierra y es unas 6,5 veces más masivo. Su tamaño lo sitúa directamente en la clase de los exoplanetas conocidos como 'super Tierras'.
La química Ainhoa Inza ha estudiado la presencia en el País Vasco de PM10, un tipo material particulado (PM) contaminante formado por partículas inferiores a diez micras de diámetro y que daña la atmósfera, la salud humana, y los ecosistemas. En cuatro años no se ha superado el valor límite anual de 40 µg/m3 de PM10, tal y como estipula la Directiva europea 2008/50/CE.
El grupo de Alberto Santos de la Universidad de Cádiz estudia la creación de un nuevo método basado en la imitación de algunos de los procesos de eliminación de CO2 que ya ocurren en la naturaleza. Será un dispositivo simple capaz de eliminar el CO2 ya existente en la atmósfera, mediante reacciones de carbonatación mineral.
Las herramientas de observación actuales no pueden informar sobre la mitad del calentamiento que se ha acumulado en la Tierra durante los últimos años. Según publica hoy Science, los sensores de los satélites, las plataformas oceánicas, y otros instrumentos no son adecuados para seguir la pista al calentamiento “perdido”. Éste podría estar acumulado en los fondos marinos.
Atmósfera de la Tierra vista desde el espacio.