El ratón Peromyscus leucopus es el principal huésped de una bacteria, transmitida por garrapatas, que causa la enfermedad de Lyme.
Así lo confirma un equipo internacional de investigadores en un estudio publicado esta semana en la revista Nature. El trabajo revela una conexión crítica entre conservación y enfermedad: las pérdidas de especies en los ecosistemas provocan el aumento de agentes patógenos, organismos que causan enfermedades.
Investigadores de la organización Conservación Internacional (CI) demuestran en un nuevo estudio presentado en la Cumbre del Clima en Cancún (México) que los índices de extinción de las 2.500 especies más singulares de anfibios, aves y mamíferos, que habitan los bosques, podrían reducirse entre un 46 y un 80% en cinco años por la reducción, bien financiada, de emisiones por la deforestación y la degradación forestal.
A pesar de estar de moda como bien de consumo, sobre todo en otoño, algunas especies de hongos son vulnerables y están amenazados. Siguiendo las líneas europeas, un grupo de investigadores españoles presentó en 2007, de forma voluntaria, una Lista Roja preliminar Hispano-Lusa de hongos. Desde entonces la lista ha quedado en el olvido junto a los hongos, que siguen sin protección oficial para su conservación.
Dos estudios internacionales, que se publican ahora en Science, aportan una nueva explicación al origen de la diversidad de las especies en el Amazonas. Uno de los equipos de científicos, que cuenta con participación española, demuestra que la diversidad de la región amazónica data de mucho antes de lo que se pensaba hasta ahora y pudo surgir con temperatura de 3 a 5ºC más elevadas que las actuales.
Tras 15 días de intenso debate, presentación de estudios y propuestas para intentar frenar la pérdida de biodiversidad con acuerdos y planes de financiación, los 193 países participantes en la X Conferencia de las Partes de la Convención sobre Biodiversidad (COP 10) en Nagoya (Japón) logran aprobar, a pesar del desacuerdo de algunos países y la ausencia de EE UU, un acuerdo general no vinculante que protegerá el 17% de las áreas terrestres y el 10% de las áreas marinas para el periodo 2011-2020.
Cuatro de las cinco especies de sapos parteros que existen en el mundo son endémicos de la Península Ibérica y todos sufren un declive en sus poblaciones por una enfermedad fúngica y por la degradación de su hábitat. La situación del sapo partero balear (Alytes muletensis) es especialmente delicada. Las medidas de protección se hacen ahora más imprescindibles que nunca.
Un equipo de 23 científicos de nueve países, entre ellos España, ha realizado un nuevo análisis de varios estudios globales sobre futuros cambios y extinciones de especies. La investigación, que se publica online en la revista Science, prevé una prolongada e inevitable pérdida de biodiversidad a lo largo del siglo XXI. Sin embargo, presenta una nueva esperanza: el fenómeno podría ralentizarse si se adoptan políticas adecuadas.
WWF ha publicado hoy el estudio ¡Amazonia Viva! Una década de descubrimientos 1999-2009. La organización ecologista confirma que se trata de uno de los espacios naturales más diversos de la Tierra, pero durante los últimos 50 años, el ser humano ha causado la destrucción de al menos el 17% del bosque tropical del Amazonas.