La Organización Mundial de la Salud ha publicado un informe sobre las cifras del tabaco en el mundo. Aunque su consumo ha disminuido desde el año 2000, esta reducción es escasa para proteger a las personas de enfermedades cardiovasculares y otras patologías no transmisibles. En España, a principios de siglo fumaba un 36,9% de la población adulta, cifra que en 2025 se espera que esté en torno al 20,7%.
Hasta la fecha, las legumbres se han considerado alimentos protectores contra diferentes tipos de cáncer, aunque la relación apenas había sido analizada. Tras un seguimiento de seis años a 7.212 participantes con alto riesgo cardiovascular, un estudio revela una asociación protectora en el consumo de estos alimentos y la mortalidad por cáncer, pero también un aumento de la causada por patologías de las arterias coronarias.
Investigadores del Instituto de Salud Carlos III de Madrid y del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona han identificado un nuevo biomarcador de la grasa epicárdica en enfermos de diabetes mellitus tipo 1. Según los autores, el impulso de ensayos basados en esta proteína puede abrir el camino a nuevas herramientas clínicas para la estratificación del riesgo metabólico en pacientes con esta dolencia.
Investigadores españoles han detectado un aumento de los niveles de la proteína quimioquina CCL20 en pacientes con aneurisma de aorta abdominal respecto a individuos sanos y enfermos ateroscleróticos no aneurismáticos. “La identificación de biomarcadores abre nuevas vías para la detección temprana de la enfermedad, su riesgo y el descubrimiento de dianas terapéuticas”, indica Mercedes Camacho, autora del estudio.
El 10% de los adultos jóvenes tienen una función pulmonar baja, por lo que su pulmón no se ha desarrollado bien, según un estudio de investigadores del instituto Clínic-IDIBAPS. Esta deficiencia podría aumentar el riesgo de aparición de otras enfermedades crónicas, como la enfermedad pulmonar obstruida crónica o la diabetes, así como de mortalidad prematura.
Un grupo de investigadores catalanes ha comprobado que los días en los que los niveles de contaminación atmosférica son más elevados en el área metropolitana de Barcelona se producen más infartos de corazón graves, más casos de fibrilación ventricular y más mortalidad por infarto. Según los expertos, reducir en 10 ug/m3 las partículas en suspensión de menos de 2,5 micras (PM 2,5) permitiría evitar como mínimo cada año y solo en la ciudad de Barcelona 19 infartos de miocardio.
Desayunar poco o nada duplica el riesgo de aterosclerosis, independientemente de otros factores de riesgo cardiovascular, según un estudio realizado por investigadores españoles. Saltarse esta comida podría servir como indicador de un estilo de vida poco saludable.
La insuficiencia cardíaca es la principal causa de hospitalización en mayores de 65 años. Para mejorar la prevención y el tratamiento de esta patología, un equipo de científicos españoles ha identificado una adecuada expresión de los genes termogénicos presentes en el tejido adiposo epicárdico como factor protector contra la dolencia.
Investigadores españoles han encontrado que la proteína ApoD desarrolla su función en los lisosomas, vesículas tradicionalmente implicadas en eliminar la llamada basura celular. El trabajo se ha publicado en PLoS Genetics.
Los astronautas de las misiones Apolo, los únicos humanos que han salido de la protectora magnetosfera terrestre, muestran mayor tasa de mortalidad por enfermedades cardiovasculares que aquellos que han volado en órbitas más bajas. Así lo recoge un estudio de investigadores estadounidenses, donde se apunta que la radiación del espacio profundo afecta negativamente al endotelio de los vasos sanguíneos.