Las células productoras de feromonas, en verde, se encuentran en el abdomen de la Drosophilia.
Utilizar larvas para la biodegradación de purines es el objetivo de un proyecto europeo de investigación que, una vez superada de fase de laboratorio, entra ahora en la de demostración de su viabilidad industrial. Para ello la Universidad de Alicante y la Diputación provincial de Valencia presentarán pasado mañana, jueves 2 de octubre, una planta piloto en Castellón en que se ensayará la cría masiva de dípteros (moscas) para que sus larvas digieran los residuos de granjas de cerdos, los purines, convirtiéndolos en abono y evitando los importantes problemas medioambientales que generan.