Más de 30 000 nidos de 176 especies de aves de todo el planeta contienen residuos antrópicos, según ha identificado un estudio liderado por la Universidad de Granada. El trabajo trata de analizar las causas de este fenómeno, entre las que se encuentra la posibilidad de que utilicen materiales no naturales para alardear de su capacidad reproductiva.
Salir del huevo en un nido situado cerca de un merendero coincidiendo con un día festivo –con afluencia masiva de visitantes– perjudica al desarrollo de los polluelos. Es la principal conclusión de un estudio de la Universidad Complutense de Madrid en el que han analizado la salud de las crías de herrerillo común nacidas en 138 cajas nido colocadas cerca de merenderos o en zonas tranquilas de un bosque de la Sierra de Guadarrama (Madrid).
Los científicos llevan años alertando de que la mosca invasora Philornis downsi amenaza a las especies de pinzones de las islas Galápagos. Ahora, un estudio internacional en el que participa la Universidad Complutense de Madrid muestra cómo otras especies de aves, los mockingbirds, resisten mejor el daño del parásito al desarrollar un mecanismo de defensa en los nidos: sus polluelos piden más comida y se alimentan mejor.
Investigadores de la Estación Experimental de Zonas Áridas de Almería han comprobado que las plumas en los nidos reducen la cantidad de microorganismos patógenos que pueden afectar a la salud de los embriones. El estudio, realizado con estorninos, es un primer paso para el análisis de estas propiedades antimicrobianas en otras especies.
Estos peces marinos Torquigener albomaculosus hacen sus nidos en los fondos de la isla de Oshima, océano Pacífico, creando círculos de unos dos metros de diámetro con diseños geométricos. / Yoki Ojkata
Los retardantes de llama llegan hasta los halcones peregrinos.
Investigadores del Grupo de Investigación del Mesozoico del Instituto Catalán de Paleontología (ICP) han descubierto el nido con 28 huevos de dinosaurio más grande de Europa en el yacimiento de Coll de Nargó (Lleida). El hallazgo permite confirmar la hipótesis de que los saurópodos enterraban sus huevos dentro de la tierra como las tortugas actuales.