Los responsables de la central nuclear Ascó II, en Tarragona, no han cumplido con rigor las Especificaciones Técnicas de Funcionamiento en relación al arranque de una bomba del sistema de refrigeración en 2010. Tras una inspección, el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha clasificado este suceso como nivel 1 en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares (INES), aunque no ha supuesto un riesgo "real" para las personas ni para el medio ambiente.
El Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) ha clasificado con nivel 1, en la Escala Internacional de Sucesos Nucleares y Radiológicos (INES), el vertido de unos 25 m3 de agua radiactiva ocurrido el pasado 28 de abril en la unidad 1 de la central nuclear de Ascó (Tarragona) por errores humanos de operación. El suceso ocasionó que 19 trabajadores se mojaran los pies con el agua, aunque los controles radiológicos han revelado que no están contaminados