La laguna de Santa Olalla se secó a finales de agosto del año pasado, y las cifras de aves acuáticas invernantes en el Parque constituyeron el segundo valor más bajo de la serie histórica. Además, la lluvia fue muy escasa, según un informe de la Estación Biológica de Doñana.
El bosque mediterráneo se reducirá prácticamente a matorral en 100 años por los efectos del cambio climático. Así lo revela un nuevo estudio que ha analizado cómo reaccionan las plantas ante el aumento de temperatura y la sequía. Los científicos concluyen que las especies vegetales persisten regulando el tiempo que dedican a realizar la fotosíntesis para ahorrar agua, pero no todas reaccionan igual.
Según un estudio de la Universidad del País Vasco, una concentración mayor de CO2 coloca a algunas plantas en una situación ventajosa para afrontar la falta e agua. Precisamente, el recrudecimiento de los periodos de sequía es una de las principales consecuencias del cambio climático, que afecta especialmente a los cultivos.