Tras varias décadas de estudio en poblaciones de babuinos salvajes, un equipo de científicos demuestra por primera vez que el estrés crónico es un factor que afecta a su supervivencia, unos resultados que en parte pueden extrapolarse a humanos. En concreto la vida de las hembras, protagonistas del #Cienciaalobestia, se puede acortar en un 25 % debido a la tensión psicosocial sufrida de manera continuada.
La energía solar es una de las mayores aliadas en la lucha contra la crisis climática y en el cumplimiento del Acuerdo de París, firmado hace hoy cinco años. En España, el objetivo es multiplicar por cuatro la potencia instalada para 2030. Pero las descomunales plantas fotovoltaicas que proliferan ya están transformando el paisaje natural y alterando el hábitat de la vida silvestre.
La secuenciación del genoma de más de 300 personas de la región del Pacífico revela cómo comenzaron a colonizar Oceanía hace unos 45.000 años. En el camino, desde África y atravesando Eurasia, se cruzaron con otras especies humanas que dejaron mutaciones y adaptaciones inmunitarias útiles para sobrevivir en entornos isleños.
La secuenciación de los genomas de los humanos más antiguos de Europa hallados en una cueva búlgara, así como los de una mujer en República Checa, confirman en dos estudios las estrechas interacciones de sus poblaciones. Los resultados reflejan lo tumultuosa que fue la historia temprana de los humanos modernos en Europa.
Mientras gran parte de la población mundial está siendo vacunada contra la covid-19, las zonas más desfavorecidas de muchos países, como en México en el estado de Oaxaca, quedan abandonadas a su suerte. Las comunidades indígenas han creado sus propios muros para evitar que el virus llame a la puerta de sus humildes hogares.
Desde los años 70 faltaban evidencias científicas para clasificar a los cetáceos de los ríos Indo en Pakistán y Ganges en la India, protagonistas del #Cienciaalobestia. Tras años de minuciosa investigación, los análisis genéticos han corroborado que son dos especies separadas.
El desarrollo de las vacunas contra la covid-19 se ha logrado gracias al uso experimental de primates no humanos, como los macacos. Este paso fundamental se está viendo ahora obstaculizado por la detención de la exportación de estos animales desde China, según advierte el experto en bienestar animal, Javier Guillén.
Cada año, decenas de millones de animales, muchos de ellos con una potente capacidad invasora, son comercializados en el mundo en un multimillonario negocio, según un nuevo metaanálisis. Muchos, como la cotorra argentina, la ardilla coreana y la pitón de Birmania, se convierten en un peligro si son liberados o se escapan en el medioambiente.
Enviar un email, ver una película por streaming, comprar on line o hacer una videollamada se han convertido en acciones cotidianas en la pandemia. Pero cada una supone un impacto ambiental no solo en forma de emisiones de CO2, sino también en gasto de agua y tierra. La mayor huella recae en la transmisión de datos.
Uno de los ingredientes fundamentales para el origen de la vida fue el fósforo procedente de los meteoritos que impactaron sobre la Tierra primitiva. Según un nuevo estudio, los relámpagos pudieron ser una fuente alternativa a la formación de fósforo a través de un mecanismo que pudo repetirse en otros planetas similares al nuestro.