Núcleo del grupo de estrellas masivas de la nebulosa NGC 3603.
Dos equipos de investigadores estadounidenses plantean esta semana en Nature cómo se pudieron originar por diversos procesos de deposición dos curiosas formaciones del casquete de hielo del norte de Marte, algo que intrigaba a los científicos desde hace 40 años. Se trata de una serie de depresiones dispuestas en espiral y de una fosa mayor que el Gran Cañón, la Chasma Boreale. El estudio ofrece nuevas evidencias sobre el cambio climático en el Planeta Rojo.
Morfología de la región del polo norte marciano. Se aprecian las hoyas dispuestas en espiral en el manto rico en hielo (con una cúpula cuasi-circular en el centro). La Chasma Boreale es el cañón de gran tamaño que divide el casquete polar en dos lóbulos, y que tiene el tamaño del Gran Cañón del Colorado y hasta 2 km de profundidad. Imagen con relieve mediante sombreado, basada en datos del altímetro láser de la sonda Mars Orbiter
Depósitos de sal en Chott el Jerid.
Un exoplaneta con una masa parecida a la de Júpiter pero con una órbita muy elíptica podría tener efectos drásticos en la órbita en un planeta similar a la Tierra.
Proceso de formación de SN 2005E. Una teoría de este nuevo sistema de explosión es que una enana blanca roba helio a una compañera, hasta que la masa robada llega a ser muy caliente y densa y se produce una explosión nuclear. El helio se transforma en elementos como el calcio y titanio, que finalmente producen los bloques para construir las futuras generaciones de estrellas.
Dos equipos de científicos, uno liderado por investigadores japoneses y otro por estadounidenses, categorizan de forma diferente dos supernovas apenas visibles (SN 2005E y SN 2005cz) que se parecen mucho la una a la otra, pero que son muy diferentes al resto de las observadas hasta ahora. Los dos planteamientos se publican esta semana en la revista Nature.